Miércoles 16 de noviembre de 2016, p. 26
Entre los ciudadanos de 12 países analizados en un estudio del banco HSBC, los mexicanos son los menos preparados económicamente para hacer frente a situaciones que cambian la vida, como perder a los padres, casarse o tener hijos. Sólo 7 por ciento (70 de mil mexicanos encuestados) habían adquirido algún producto financiero o de protección que lo respaldara económicamente al presentarse un suceso que significó un cambio importante en sus vidas, menos de la mitad respecto al promedio de 17 por ciento en los demás países. Para los mexicanos los tres acontecimientos personales con más trascendencia son: tener un hijo (68 por ciento), perder a alguno de los padres (55 por ciento) y casarse (46 por ciento). Consideraron menos determinantes
acontecimientos relacionados con el trabajo, al grado de que sólo 28 por ciento de los entrevistados dijeron que perder el empleo significó un cambio importante.