Tesis de maestría premiada por la Anuies aborda el problema de estas jóvenes
Martes 15 de noviembre de 2016, p. 37
Las estudiantes de educación superior que se convierten en madres enfrentan, aun antes de dar a luz, situaciones de vulnerabilidad y, debido a falta de planeación del primer embarazo, adelantan otras circunstancias de vida, como la unión en pareja o la incorporación al sector laboral. En consecuencia, el ingreso y egreso de la universidad dependerán del valor que cada una otorgue a los estudios y de los recursos de que disponga.
Vanessa Arvizu Reynaga, alumna del doctorado en sociología de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), obtuvo el Premio Anuies a la Mejor tesis de maestría 2016 con el trabajo Madres en la universidad: una exploración a las trayectorias educativas y cursos de vida de los estudiantes de la UAM-A, en el que analiza sucesos biográficos –incluida la escolaridad– de las mamás que cursan estudios en la sede académica de Azcapotzalco.
Arvizu Reynaga estudió en qué medida el cruce de la maternidad y la educación genera ventajas o desventajas para el desarrollo académico.
Una de las conclusiones señala que la unidad Azcapotzalco de la UAM es un lugar poco idóneo para ejercer la maternidad, pues los espacios no son adecuados para que ellas lleven a sus hijos; las condiciones y requisitos escolares suelen dificultar el ingreso y la permanencia, además de que no hay políticas universitarias completamente efectivas para atender a este sector de la población y solventar los obstáculos
.
Explicó que el denominado curso normativo no opera muy bien en el caso de las madres estudiantes
, porque supone que para que una persona se convierta en adulta debe egresar de la universidad, obtener un empleo, alcanzar la emancipación, unirse a otra persona y tener hijos.
Las madres que continúan sus estudios han roto ese esquema, señala, el cual no se aplica para ellas
porque se enfrentan a situaciones como discriminación, las cuales prevalecen y afectan la trayectoria escolar, incluso con la intervención de la propia familia, que llega a conminarlas a que abandonen la universidad para cuidar a los hijos.
Además, surgen dificultades para cumplir las políticas institucionales, pues a pesar de mantener un buen promedio es difícil cubrir los requisitos del servicio social o participar en el programa de movilidad académica.