Kabul.

El ejército estadunidense en Afganistán reconoció este sábado que muy probablemente mató civiles durante los bombardeos del jueves pasado en la provincia norteña de Kunduz, donde fallecieron al menos 30 personas, entre ellas varios niños.

Decenas de familiares de las víctimas se manifestaron ante las oficinas del gobernador de Kunduz mostrando los cadáveres de los niños.

En tanto, el portavoz de la presidencia afgana informó en una conferencia de prensa que el mandatario Ashraf Ghani Ahmadzai envió una delegación especial al lugar para investigar el incidente y dijo que toda negligencia será castigada.

El general Charles Cleveland, uno de los jefes militares estadunidenses en la zona, indicó que los primeros indicios muestran que el ataque aéreo muy probablemente causó víctimas civiles, por lo que inmediatamente ordenó una indagatoria.

El bombardeo se realizó a petición de las fuerzas afganas en la periferia de la ciudad de Kunduz, en la provincia del mismo nombre, y se produjo durante las primeras horas del jueves, luego de que dos soldados estadunidenses y tres miembros de las fuerzas especiales de Afganistán murieran a manos de militantes talibanes. Los efectivos fallecidos fueron agredidos mientras ayudaban a las tropas afganas a despejar una posición de los talibanes en el distrito de Kunduz, indicó la Organización del Tratado del Atlántico Norte.

En un breve comunicado publicado en la red social Twitter, la alianza confirmó el bombardeo y dijo que se llevó a cabo para defender a fuerzas aliadas que estaban siendo atacadas. Quince años después del inicio de la campaña de la coalición en el país asiático, la muerte de civiles constituye el principal problema para las tropas occidentales.

Por su parte, el Pentágono confirmó el deceso de Farouq al-Qahtani, emir del grupo extremista Al Qaeda para el noreste de Afganistán, durante una ofensiva aérea estadunidense el mes pasado, lo cual significó el mayor golpe asestado contra los yihadistas que intentan restablecer posiciones en esa nación.

Este exitoso ataque es otro ejemplo de las operaciones de Estados Unidos para degradar las redes terroristas internacionales y tomar como blanco a líderes terroristas que buscan agredir la patria estadunidense, nuestros intereses y a nuestros aliados en el exterior, aseveró el portavoz del Departamento de Defensa, Peter Cook, quien confirmó que Qahtani murió el 23 de octubre en Kunar.

Tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 Estados Unidos lanzó una vasta operación contra los talibanes y Al Qaeda.