Las tarifas de luz no han dejado de incrementarse en todo el sexenio; los mexicanos pagamos 100 y hasta 200 por ciento más caro el servicio que al inicio del régimen, además de que continúan los cobros exorbitantes y es falso que no se elevan los costos para el servicio doméstico, señaló el Movimiento Nacional de Usuarios de Energía Eléctrica (Mnuee).

En un pronunciamiento a propósito del anuncio de la Comisión Federal de Electricidad sobre el nuevo aumento, indicó que la aplicación de la tarifa doméstica de alto consumo (DAC) es un engaño y altamente nociva para la economía y la estabilidad de los consumidores medios, que junto con la imposición de los medidores inteligentes ha encarecido gravosamente la energía eléctrica para millones de consumidores.

Lastre para empresas y bolsillo de usuarios: IP

Por su parte, el sector privado consideró un lastre para las empresas y el bolsillo de la población los recientes gasolinazos y el incremento a la energía eléctrica, lo que inhibirá la llegada de nuevas inversiones y estancará la economía.

Jesús Padilla, presidente de la Coparmex-CDMX, señaló que, contrario a los beneficios augurados por el gobierno federal respecto de las reformas, nos han recetado un quinto aumento en las tarifas eléctricas, siendo los sectores industrial y comercial los más perjudicados. Es poco factible que el aparato productivo pueda soportar esta constante elevación de precios sin que ello golpeé la economía de la gente, dijo.

El Mnuee llamó a todos los comités de usuarios del país, sectores políticos y sociales a participar en la construcción de un movimiento nacional contra los altos cobros de la luz, que se llevará a cabo el próximo 5 de noviembre.

Los ciudadanos, afirma, son víctimas de la corrupción y el saqueo que han realizado altos funcionarios de la CFE, como Néstor Moreno, ex director de operaciones, que robó por lo menos mil 320 millones de pesos; la poca inversión del gobierno federal en esta empresa y el mal servicio imperante en la misma, así como las sistemáticas violaciones a los derechos de los usuarios y los exagerados cobros del servicio.

Expuso que junto con otras organizaciones, como la Red Nacional de Resistencia Civil –que lleva a cabo la campaña de colgados, que consiste en colgar monigotes en puentes y vialidades con letreros que dicen: a mí también me robo la CFE– continuará con los amparos de los usuarios.