La embajadora de Venezuela en México, María Lourdes Urbaneja, dijo ayer que la gente en la calle logró derrotar el paro al que había convocado la oposición, al considerar que el gran drama de ésta es que nunca ha reconocido que el pueblo votó por una opción diferente y con ello decidió construir un país soberano.

Al continuar el seminario El proceso bolivariano: constitución, economía y política, que se llevó a cabo en la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México, subrayó que el paro no se realizó, aunque los opositores pretendieron dar la idea de que sí se efectuó.

Por su lado, Óscar Upegui Flores, ministro consejero de la embajada, señaló que desde la llegada del chavismo al poder se tocaron intereses de Estados Unidos, país que no se ha quedado tranquilo y ha generado diversas estrategias contra las políticas gubernamentales venezolanas. Dentro de ellas no descartó que haya la intención de intervenir militarmente.

Explicó que el presidente Nicolás Maduro ha hecho esfuerzos por mantener la estabilidad. En este escenario, puntualizó que la tradición popular de las fuerzas armadas y la aplicación de una nueva doctrina militar, nacionalista, antimperialista, con alto contenido social, ha impedido la aparición en los mandos castrenses de algún elemento disidente que pretenda irrumpir la institucionalidad del cuerpo armado.

En su oportunidad, Walter Martínez, de la Coordinadora Mexicana de Solidaridad con Venezuela, manifestó que en los planes del comando sur de Estados Unidos para la nación sudamericana no se rechaza la posibilidad de la intervención militar, aunque será difícil que prospere, por la existencia de comités de base distribuidos por todo el territorio.

Pablo Moctezuma Barragán, jefe delegacional en Azcapotzalco, resaltó la creación de comunas en suelo venezonalo, que no son otra cosa que la concreción del poder popular.