El lunes pasado Hollywood abrió sus puertas al hombre más rico de China, Wang Jianlin, quien encabeza Dalian Wanda Group. Seducido por la luminosidad de la Meca del Cine llega al soleado estado de California para disputar la producción y distribución mundial de cine a los grandes estudios estadunidenses. El anuncio fue hecho en el Museo de Arte del Condado de Los Ángeles, al cual asistieron representantes de la industria fílmica; el alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, y la presidenta de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas, Cheryl Boone.

En la reunión se informó que el también dueño de los estudios Legendary, quien acaba de adquirir la segunda cadena de exhibición cinematográfica más grande de Estados Unidos, las salas AMC, está edificando 30 estudios con una inversión de casi 9 mil millones de dólares.

El pasado 30 de septiembre un funcionario del sindicato de actores de Hollywood anunció a los medios que Hollywood daba la bienvenida a la inversión de otros países, incluso China, para estimular las producciones de la industria estadunidense. Estamos agradecidos por la inversión de otros países, dijo en su momento Ray Rodríguez, funcionario en jefe de contratos del Gremio de Actores de Cine y la Federación Americana de Artistas de Televisión y Radio.

Ese dinero al final redituará a nuestros miembros. Estamos felices de ver que nuestros actores puedan ganar lo más que puedan, agregó Rodríguez. Contar con inversión extranjera no es nuevo para Hollywood. Hace poco, el conglomerado chino Dalian Wanda anunció que está en conversaciones para adquirir el control de Dick Clark Productions, entidad detrás de los Globos de Oro, la Academia de Premios de Música Country y los Billboard.