Seúl.

El banco central de Corea del Sur redujo el pronóstico de crecimiento económico para el próximo año, tras examinar el impacto potencial generado por la crisis del smartphone Galaxy Note 7.

El Banco de Corea (BOK, por sus siglas en inglés) reajustó a la baja su pronóstico de crecimiento económico para 2017, de 2.9 por ciento hace tres meses a 2.8 por ciento. La cifra es menor que la previsión gubernamental de 3 por ciento.

El gobernador del banco central, Lee Ju-yeol, señaló que las autoridades de política monetaria tomaron en cuenta las repercusiones que tiene la retirada del mercado mundial del Galaxy Note 7 por parte de Samsung, la mayor empresa sudcoreana, que representa 17 por ciento del producto interno bruto (PIB) del país. Es probable que tenga un impacto a nivel nacional, precisó el directivo, después de la reunión mensual de política monetaria.

Samsung anunció una retirada mundial del smartphone Galaxy Note 7 el mes pasado, después de que algunos de los móviles ardieran mientras se cargaban. El mayor fabricante de teléfonos inteligentes del mundo decidió, a principios de esta semana, terminar la producción del modelo, unos días después de reanudar las ventas de sus remplazos, que continuaron causando problemas similares.

Este movimiento provocó que el precio de las acciones de Samsung se fuera en picada, perdiendo en una jornada casi 8 mil millones de dólares, y lo obligó a recortar su estimación de beneficio para el tercer trimestre del año. Las acciones de Samsung hilaron tres días de caídas y acumularon pérdida de 21 mil 400 millones de dólares en valor de mercado. Las acciones de Samsung cerraron el jueves con una subida de 1.43 por ciento.

En su mercado doméstico, la empresa ofreció rembolsos o intercambios por otros productos. A los clientes que devolvieron su Note 7, cuyo precio se sitúa en torno a 800 dólares, se les ofreció un cupón por valor de 30 mil wones (26.91 dólares), mientras que a aquellos que aceptaron intercambiarlo por otro teléfono de gama alta de Samsung se les prometió un crédito adicional de 70 mil wones.

En Estados Unidos, Samsung amplió su llamado a retirar del mercado los Galaxy Note 7, casi 1.9 millones dispositivos, incluido un millón remplazados en septiembre.

En México, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) instó a los poseedores de Samsung Galaxy Note 7 a acudir a los centros de atención a cambiar la unidad por una de menor precio o bien solicitar la devolución del dinero.

La dependencia reforzará la vigilancia para que se respeten los derechos de los usuarios que resulten afectados por la empresa Samsung, que ordenó el retiro del modelo Galaxy Note 7 debido a que se han registrado casos en los que explotan las baterías. En el mercado mexicano no se han reportado tales casos.

Profeco dijo que los centros de atención a clientes autorizados podrán a cambiar el Galaxy Note 7 por un Samsung Galaxy S7 Edge o cualquier otro dispositivo móvil Samsung. En este caso será rembolsada la diferencia entre el precio pagado por el Note 7 y el del equipo seleccionado.