La Habana.

Después de décadas de conflicto entre Cuba y Estados Unidos, el deshielo político entre ambos países también se vive en el deporte. Luego de casi 70 años, el equipo de futbol estadunidense se enfrentará este viernes en partido amistoso a los caribeños, que ya están fuera de las eliminatorias mundialistas y de la Copa de Oro del próximo año.

Como parte del restablecimiento de las relaciones diplomáticas, Barack Obama, presidente de Estados Unidos, y Raúl Castro, mandatario de Cuba, asistieron el 22 de marzo en esta ciudad a un juego de exhibición de beisbol entre los Mantarrayas de Tampa Bay y la novena isleña, que coronó la visita de un dirigente estadunidense a la isla después de 88 años.

Esta vez el balompié se sumará a la nueva era Cuba-Estados Unidos. Ambas selecciones chocarán en el estadio Pedro Marrero en el primer duelo desde 1947. En ese entonces Cuba se impuso 5-2 en la única victoria de los caribeños sobre los estadunidenses.

Ambos equipos han sostenido 12 encuentros con saldo favorable para EU, que ha vencido nueve veces. En partidos oficiales se han enfrentado en eliminatorias mundialistas y copas Oro de la Concacaf. La más reciente fue el pasado 18 de julio cuando la escuadra dirigida por Jürgen Klinsmann goleó 6-0 a los isleños.

Vamos a salir a dar la cara pero tomando precauciones, aseguró el técnico Raúl Mederos, quien debutará al frente de Cuba, y agregó que la carta fuerte será el delantero Maikel Reyes, jugador de Cruz Azul.

Para Estados Unidos este duelo servirá como preparación rumbo al hexagonal de la Concacaf, en el que enfrentará el 11 de noviembre a México. Veremos a los jugadores antes de decidir a los 23 (futbolistas) para la eliminatoria mundialista, destacó Klinsmann.

Podemos perder el partido por goleada, empatar o ganar, pero lo más importante es salir a jugar, no escondernos, hacerlo con entrega a merced del resultado, afirmó Mederos.