Londres.

En una entrevista con la revista Rolling Stone que se conoció hoy, Tyson Fury, campeón mundial de los pesos pesados, admitió que para luchar contra una profunda depresión se refugió durante los recientes meses en el alcohol y en las drogas.

Soy maniaco depresivo, afirmó el boxeador, quien añadió que desde hace años sufre esta enfermedad. Contó que últimamente bebió mucho alcohol y consumió cocaína todos los días.

Sólo espero que alguien me mate antes de que yo lo haga, dijo el británico de 28 años, explicando de forma conmovedora cómo se siente.

No es raro que las personas maniaco-depresivas intenten suicidarse. Así confirmó los rumores que corrían desde hace semanas por los medios de su país.

Lo único que me ayuda es beber hasta perder el conocimiento, dijo.

Su mánager, Mick Hennessy, anunció hace apenas dos semanas que su representado debía someterse a un tratamiento médico y que necesitaría una larga pausa, por lo que canceló por segunda vez la esperada revancha ante el ucranio Vladimir Klitschko.

El alcohol y las drogas son para él lo único que le permite lidiar con sus problemas sicológicos, explicó. Sin embargo, desde hace unos días Fury está sobrio.

El campeón de los pesos pesados de los cinturones WBO y WBA se destacó últimamente por sus confusas y alarmantes declaraciones.

Antes del combate contra Klitschko, en noviembre del año pasado, fue noticia por sus comentarios de odio contra mujeres, homosexuales y minorías, y por llamar al ucranio satánico. Éste denominó los ataques de Fury como insoportables y expresó: Es un paciente que necesita tratamiento.

El británico, en tanto, señalaba: También he consumido cocaína. Mucha, ¿por qué no?, al considerar el consumo de este enervante una especie de indicación médica.

Y no es una sustancia que mejore mi rendimiento. Nunca he boxeado dopado o bajo los efectos de las drogas, aseguró el pugilista.

La agencia antidopaje independiente estadunidense WADA constató en un control durante los entrenamientos del 22 de septiembre que el boxeador había consumido cocaína. Un día después Fury anuló el combate de revancha planeado para el 29 de octubre contra Klitschko.

El pugilista británico ganó por puntos un año antes el primer enfrentamiento.

El pasado fin de semana el boxeador se burló de las acusaciones contra él de consumir cocaína con un fotomontaje, con la imagen del actor Al Pacino en la película Scarface. Después anunció su retirada en Twitter, aunque más tarde dijo que se trataba de una broma.

Aún no se sabe si volverá al cuadrilátero después de esta pausa, pues de nuevo habló de su posible retirada. De niño amaba el boxeo, dijo.

Ahora lo odio.