Oaxaca, Oax.

El anunciado recorte al presupuesto de cultura me parece terrible y espero que sólo sea un amague político, porque es una insensibilidad muy grande; recortar el fondo que recibimos todos los estados sugnifica, quizá, más de 80 por ciento de las actividades a escala nacional, expresó en entrevista Alonso Aguilar, secretario de las Culturas y las Artes de Oaxaca, después de inaugurar el miércoles el sexto Encuentro Nacional de Tradición y Nuevas Rolas, en el Centro de las Artes de San Agustín (CaSa).

En este encuentro participarán 16 grupos que cantan en sus lenguas originarias, de 16 estados, y que representan a 11 pueblos indígenas.

Entre los proyectos que intervendrán se hallan Juan Sant, hip hop totonaco de la Ciudad de México, originarios de Terrero, Pantepec, Puebla; Ik’ al Ajaw, heavy-power metal, de Oxchuc, Chiapas; Los Meseños, música popular nahua de San Pedro de Jicora, Mezquital, Durango; Llano de León, chilena tu’ un savi, de Metlatónoc, Guerrero; Colectivo Dethä, hip hop ñañú, de San Bartolo Tutetepec, Hidalgo; Ireri, fusión purépecha, de Puácaro, Erongarícuaro, Michoacán; Voces de mi Tierra, norteño nahua, de Tetela del Volcán, Morelos, y Los Vagos de la Sierra, música regional wixárica, de El Nayar, Nayarit, entre otros.

Talleres y conferencias

Para apoyar el desarrollo de estos grupos participarán en talleres y conferencias músicos como Jaime López, Jaime Luna, Rafael Mendoza, Natalia Toledo, Mardonio Carballo, Víctor Cata, Mauro Delgado Jiménez, Mónica del Carmen, Amílkar Jiménez, Damián Martínez, Celso Duarte, Leonardo Soqui, Mauricio Sotelo, Frino y Edgar Arrellín. Las actividades y conciertos se desarrollarán hasta el domingo próximo.

Alonso Aguilar añadió que CaSa es un centro de arte vanguardista nacional y latinoamericano, que se basa en tres pilares: arte, comunidad y medio ambiente. Está asentado en lo que fue una fábrica textil del siglo XIX. Fue adquirida por el maestro Francisco Toledo. Después se formó una copropiedad con el gobierno del estado de Oaxaca y la Asociaión Amigos de los Archivos Históricos. En él se desarrollan, desde hace 10 años, talleres que tienen que ver no sólo con la valoración del arte, sino con aspectos identitarios y la puesta en marcha del capital cultural contemporáneo de las comunidades indígenas que a veces no se notan.

Un caserío rodea a CaSa, levantado en un cerro con árboles y arbustos, flores y hierba. El clima es fresco y la infraestructura es amplia y cómoda. Actualmente hay exposiciones de fotografías de la colección de Toledo. La museología cuida la luz, para mejor disfrute de las imágenes.

Alonso Aguilar abundó sobre el recorte. Un problema que, dijo, está ahogando a Oaxaca y a su cultura es que no llegan recursos ya asignados, los cuales ascienden a 14 millones 200 mil pesos, que las autoridades de la Secretaría de Cultura federal no han entregado. Este organismo no los libera porque Hacienda los está atorando, precisó el funcionario.

Están detenidos, expuso, los programas de teatro, que no se renuevan. “Quitaron el fondo que tiene que ver con la preservación del patrimonio tangible e histórico del país. Estamos ante lo que podría ser un desastre cultural en Oaxaca. Esta situación es terrible.

Los diputados, Hacienda, la Secretaría de Cultura federal... la distancia que hay a veces obstaculiza el valor de los proyectos que se ponen en riesgo. Están haciendo que los estados tengan que ver a la cultura como productora de bienes económicos, lo cual nos coloca ante el peligro de la fetichización de la cultura. El peligro es que la cultura se desgaste. Si esto sigue cada estado deberá planear estrategias para proveerse de recursos económicos. También los recursos culturales se desgastan socialmente. Esto sería muy grave para México.