Senadores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) consideraron preocupante la fuerte reducción del presupuesto federal destinado a los pueblos y comunidades indígenas en 2017, ya que es de más de 11 mil millones de pesos, y demandaron a los diputados corregir esa situación, pues repercutirá en forma negativa en el nivel de vida de ese grupo poblacional, uno de los más vulnerables del país.

La Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, que año con año ha sufrido ajustes presupuestarios, queda con menos del 41 por ciento de los recursos asignados en 2016, ya que se le reducen 11 mil 950 millones 950 mil pesos. A ello se suma la disminución de partidas de otras dependencias para las comunidades originarias, advirtió el priísta Sofío Ramírez.

Igualmente, la Comisión de Asuntos Indígenas del Senado, que preside el tricolor Jorge Toledo, resaltó que los recortes afectarían de manera directa los programas sociales para ese sector.

Ese organismo advierte en un reporte que se elimina el programa para la productividad rural y desaparece el único dirigido a la mujer indígena, así como los de educación y cultura.

Del ramo 09, destinado a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, el proyecto del Presupuesto de Egresos de la Federación para 2017 se reduce en 70 por ciento, por lo que se suprimen planes de construcción de carreteras y se reduce hasta en 50 por ciento el programa de empleo temporal.

Los recursos para el cuidado del medio ambiente de las comunidades indígenas también son ajustados. Destaca la reducción de 41 por ciento al apoyo para la infraestructura hidroagrícola, de 64 por ciento al desarrollo forestal sustentable y la eliminación del programa para la igualdad y sustentabilidad ambiental.

Asimismo, se elimina la promoción de los derechos humanos de los pueblos indígenas, ya que no se le asignan recursos.

El senador Ramírez consideró de alta preocupación el recorte previsto, ya que hay una reducción global de 12.86 por ciento de los recursos a los indígenas, y contrario a lo planteado por el presidente Enrique Peña Nieto en su cuarto Informe de gobierno.

Ramírez presentó un punto de acuerdo, a fin de que el Senado pida a la Cámara de Diputados que en el presupuesto de 2017 se asignen recursos suficientes para la atención y desarrollo de las comunidades originarias.