Tampico, Tamps.

La costa de Tamaulipas se convirtió en un refugio para migrantes centroamericanos, quienes por miedo a terminar en una fosa clandestina en su trayecto hacia Estados Unidos decidieron radicar en Tampico de forma legal.

No me quise arriesgar mucho, dije hasta aquí voy a llegar. Se dicen muchas cosas de que a lo mejor llegas a Estados Unidos, a lo mejor no, comenta Jéssica Zenayda Rodríguez Matute, una de los 19 extranjeros que recibieron este año su cartilla de residencia del Instituto Tamaulipeco del Migrante (ITM).

Rodríguez Matute salió de Honduras en 2013 para tener una mejor calidad de vida; sin embargo, Estados Unidos nunca fue su opción. Está muy difícil allá (en Honduras), no hay trabajo, hay violencia y todas las personas quieren venir acá (a México).

Tras varios días de viaje desde La Ceiba, comunidad cercana a San Pedro Sula en su país de origen, hacia el sur de Tamaulipas, Rodríguez prefiere no hablar de lo que tuvo que pasar, sólo recuerda que las personas que viajaron con ella “venían pidiendo a Dios para poder llegar a Estados Unidos.

Conocí a una señora que decidió irse hasta allá (al país vecino del norte), no volví a saber nada, porque a veces los matan, refiere.

Su esposo, un joven veracruzano, carga junto a ella al hijo de ambos. Gracias a Dios estoy aquí con mi hijo y mi esposo, comenta mientras sus ojos se llenan de lágrimas.

Tras la masacre de San Fernando en mayo de 2010, cuando 72 migrantes centroamericanos fueron asesinados por pistoleros del grupo delictivo Los Zetas, como oficialmente se dijo, el gobierno de Tamaulipas creó en 2011 el ITM, organismo que protege los derechos humanos de los ciudadanos extranjeros en tránsito y de los mexicanos deportados de Estados Unidos.

Al instituto acudían mensualmente cerca de 350 indocumentados. En los pasados cuatro meses la cifra se redujo a la mitad, explica Ruth Martínez Rodríguez, titular del ITM.

Desconocemos por qué se redujo el flujo de migrantes, hasta hace cuatro meses recibíamos 350 extranjeros cada mes, ahora sólo vienen unos 150, señaló.

En lo que va de este 2016 el gobierno de Tamaulipas ha atendido a casi 9 mil extranjeros, la mayoría originarios de El Salvador, Honduras y Guatemala; sólo tiene registrado a un migrante de Medio Oriente.