Crecen las protestas contra el gobernante, que ha anunciado un severo ajuste fiscal
En su visita a China, un empresario le dio entusiasta bienvenida: Welcome Mr. Fora Temer
Golpistafue uno de los gritos más escuchados ayer en Brasilia contra el presidente Michel Temer, en el desfile cívico-militar para festejar 194 años de independencia en BrasilFoto Ap
Jueves 8 de septiembre de 2016, p. 26
Brasilia.
El nuevo presidente de Brasil, Michel Temer, presidió este miércoles en esta capital el desfile cívico-militar con motivo de los 194 años de la independencia, en medio de protestas y abucheos por sus planes de severos ajustes, una semana después de sustituir a la izquierdista Dilma Rousseff. Con silbidos y gritos de ¡Fora Temer! (Fuera Temer) y ¡golpista!
como marco, el mandatario encabezó la ceremonia junto a su esposa y varios ministros.
En lo que fue su primer acto público desde que asumió la presidencia, tras la destitución de Rousseff, quien fue acusada de irregularidades fiscales, Temer no desfiló en el automóvil Rolls Royce convertible de los años 50 –como es tradición en esta fecha– ni lució la banda presidencial por encima del traje.
A unos metros del desfile cívico militar, en la principal avenida capitalina, cerca de 3 mil manifestantes, según la policía, marcharon hacia el Congreso coreando consignas contra el gobierno, al que acusan de impulsar retrocesos sociales.
Durante las dos horas que duró el desfile, varias personas que asistieron a la parada acusaron al nuevo mandatario de golpista
, a lo que un hombre respondió: ¡Fuera comunistas!
Agentes de seguridad se acercaron a un hombre que estaba en las graderías y que llevaba un cartel en que se leía: Fuera Temer
, pero no lo obligaron a dejar el recinto.
La ceremonia contó un contingente de cerca de mil 500 policías y 150 agentes del gabinete de seguridad institucional.
La celebración por los 194 años de la independencia y estas protestas se acoplaron a una tradicional manifestación popular denominada Grito de los Excluidos, que desde 1995 se celebra en varias ciudades del país cada 7 de septiembre para reivindicar derechos sociales y el freno a la violencia contra los más pobres.
En la jornada de lucha, en la que participan movimientos populares, entidades sindicales y pastorales, tampoco quedaron fuera las denuncias del golpe parlamentario
contra Dilma Rousseff.
Esta vez, la población salió a las calles en al menos 40 ciudades del país al grito de ¡Fuera Temer, ningún derecho menos!
La marcha más concurrida fue en Belo Horizonte, capital de Minas Gerais, donde los movimientos que convocaron la protesta informaron de la adhesión de unas 30 mil personas. En Sao Paulo se reunieron unas 10 mil, mientras en Río de Janeiro la cifra fue de 20 mil.
Para Segue Raimundo Bonfim, de la Central de Movimientos Populares (CMP), esta jornada se da en un momento muy particular del país, sobre la égida de un golpe. “Ellos creían que pasado el impeachment el país sería pacificado, pero estamos viendo una reacción contestataria muy importante frente al golpe”, señaló.
Bonfim alertó sobre las diversas amenazas de la reducción de derechos sociales conquistados en las últimas décadas, como la desarticulación del Sistema de Seguridad Social, la flexibilización de las leyes laborales y la entrega de las riquezas naturales del país, como las reservas de petróleo.
Frente a esta situación, la dirección nacional del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), Kelli Mafort, dijo que las movilizaciones están cobrando mucha fuerza, especialmente en Sao Paulo, que ha sido uno de los focos de este proceso de lucha, mientras el presidente de la Central Única de los Trabajadores (CUT), Vagner Freitas, insistió en la necesidad de estallar una huelga general en el país.
Movimientos populares, sindicatos y gremios del campo realizan esta semana la Jornada de Luchas Unitarias de Trabajadores y Trabajadoras y Pueblos del campo y de las Forestas, en protesta por la reducción de derechos anunciada por el nuevo gobierno. Las acciones de los campesinos incluyen ocupaciones de edificios públicos y bloqueos carreteros.
Para enfrentar el déficit que se disparó en los últimos años e intentar revertir la profunda recesión económica que atraviesa Brasil, el presidente Temer anunció un severo ajuste fiscal, con una delicada reforma al sistema de jubilaciones.
Un programa que la izquierda y movimientos sociales ven como un retroceso de los derechos conquistados durante los 13 años del Partido de los Trabajadores (PT) en el poder, primero con Luiz Inacio Lula da Silva (2003-2010) y luego con Dilma Rousseff.
En tanto, la prensa brasileña informó que en su reciente visita a China Temer fue saludado por un empresario de esa nación con un entusiasta: Welcome Mr. Fora Temer
. La confusión del hombre, que se saltó el protocolo e ihizo a un lado a su intréprete, surgió por la consigna en las constantes protestas en contra del mandatario en Brasil desde que asumió la jefatura de Estado.