María de los Ángeles Ortiz está convencida de que por ser campeona defensora y número uno mundial en lanzamiento de bala todas las rivales querrán vencerla, pero no lo permitirá en Río de Janeiro, sus terceros Juegos Paralímpicos, que marcarán su retiro.

La tabasqueña, quien compite en silla de ruedas, levanta sus brazos fuertes y musculosos, como señal del largo proceso de entrenamiento que realizó para enfrentar una de las competencias más difíciles por el alto nivel que ha visto desde el mundial pasado, en Qatar, donde ganó con récord del certamen (11.13 metros), la decimocuarta ocasión que mejoró su plusmarca.

Soy una gladiadora, una guerrera en el campo, se repetía a sí misma la competidora de 43 años, a quien le amputaron la pierna izquierda hace más de una década. Su vida dio un giro al incorporarse al deporte adaptado y posteriormente el alto rendimiento durante ese tiempo.

La lanzadora no se intimida ante las adversidades, aunque tampoco hace gala de sus éxitos, ya que son parte del empeño que se asume con constancia, disciplina y trabajo, aunado a las obligaciones que tiene para atender a su marido e hija.

Ortiz viajó radiante a Brasil, como la primera vez, cuando conquistó la medalla de oro en los Parapanamericanos de 2007, pero sabe que el destino no será diferente, porque se ve en el podio por tercera vez consecutiva en una justa paralímpica.

Quiere despedirse en grande, porque una vez que se retire seguirá en el deporte, pero en otro ámbito, para pelear y defender desde mi trinchera a los que entregan alma y corazón en las diferentes disciplinas.

Afirma que ya recibió ofertas y las que ha rechazado son las políticas, porque estará con los más necesitados, pues con todo lo que sucede en el deporte, éste requiere de una limpieza a fondo, de quitar cabezas en dirigencias que reciben recursos y no se ven resultados, de lo contrario, seguirá igual y en declive.

En el último contingente que partió ayer a Río destacaban dos veteranos. La medallista en jabalina y disco, María Estela Salas, quien promete dar lo mejor para estar en el podio, ya que hace cuatro años finalizó cuarta en Londres, y el maratonista Pedro Meza, sexto, en esa misma justa.

Amputado de los brazos, Meza señaló que va bien preparado para terminar la prueba a la que fue invitado al final tras la exclusión de los rusos por dopaje. No es un lugar regalado y espero hacer un buen papel.

El equipo de futbol 5 para ciegos y débiles visuales va por medalla, afirma Alejandro Fernández, coordinador nacional, que sobresale porque la mayoría son de San Luis Potosí.

La delegación tricolor es de 69 competidores, la mitad ya se encuentra en la ciudad sede para la justa del 7 al 18 de este mes. En Londres 2012, México obtuvo 21 medallas, seis de oro, cuatro platas y 11 bronces.