Con la mente puesta en mejorar los resultados obtenidos en el pasado, ayer partieron rumbo a los Juegos Paralímpicos de Río 2016, que se realizarán del 7 al 18 de septiembre, siete de los 69 competidores nacionales que participarán en la máxima competencia mundial del deporte adaptado.

La presidenta del Comité Paralímpico Mexicano, Liliana Suárez, informó que debido a la situación que prevalece con la delegación rusa con el dopaje sistemático de Estado detectado, a nuestro país se le concedieron tres plazas más para la justa, las cuales serán ocupadas por dos competidores de maratón y uno de natación.

En el caso de la juvenil nadadora Valeria López, de 17 años, quien hará su debut, dijo que nada le gustaría más que colgarse una medalla en alguna de las tres pruebas (400, 100 y 50 metros libres), aunque sabe que la labor no será fácil, no sólo porque competirá con otras dos compatriotas, sino porque europeas y asiáticas han mostrado buen nivel.

Uno de los participantes históricos en estas competencias es Arnulfo Castorena, quien buscará recuperar un sitio entre los tres mejores del mundo a sus 38 años de edad en los 150 metros combinados y en los 50 pecho de natación, labor compleja porque tres chinos lo han mandado hasta el sexto sitio mundial, aunque está comprometido en regresar por lo menos con una presea.

Otro de los veteranos del deporte adaptado de la delegación nacional es Salvador Hernández, quien acudirá a su sexta cita olímpica preparado de la mejor forma, porque en esta ocasión recibió un buen apoyo y espera obtener su octava medalla en los 100 metros.