El clavadista iguala a Álvaro Gaxiola, que lo consiguió en los juegos de México 68
Desconsolado, Iván García, quien fue décimo, señaló: Ni modo, a chingarse por otro ciclo
Domingo 21 de agosto de 2016, p. 3
Río de Janeiro.
Después de 48 años, Germán Sánchez puso de nuevo a México en el podio olímpico al obtener la medalla de plata en la plataforma de 10 metros individual, para repetir la hazaña de Álvaro Gaxiola en 1968, cuando su país organizó la justa cuatrienal.
El tiempo de Dios es perfecto y no me queda más que disfrutar. Hoy tengo la de plata y mañana vendrán nuevos retos
, dijo el jalisciense al conseguir el ansiado metal que se le había negado al equipo de clavados y cayó en la penúltima jornada de la cita brasileña.
Hoy yo me pongo la medalla, pero aquí hay mucho trabajo y personas que dejan familias para estar aquí
, agregó el Duva, quien superó lesiones y cirugías del hombro derecho por un mal congénito que lo dejaron fuera en la mitad de este ciclo.
A sus 24 años, Sánchez ya tiene dos metales olímpicos. El primero también fue plata, aunque en esa ocasión lo consiguió con Iván García en los sincronizados de 10 metros en Londres 2012, pero en Río no se dieron las cosas y terminaron en la quinta posición.
Sin ser el favorito, Germán alcanzó el podio en una final muy peleada entre los 12 contendientes, pero sus tres últimos saltos, de mayor dificultad, recibieron notas que le dieron 98.05, 95.20 y 91.20 puntos, ya que los tres primeros fueron de 84.15, 81.60, 82.50, para un total de 532.70 unidades.
Fue una medalla que no se esperaba por mi parte. Es un hincapié de que nada es imposible. Que en este deporte puede pasar todo. Cuando haces las cosas con el corazón tienes mejores resultados
, puntualizó el clavadista aficionado a la lucha profesional.
Su entrenador, Iván Bautista, admitió que aunque veníamos un poquito bajos, (Germán) sacó la casta y se dio. Estoy feliz por esa plata, porque él tuvo muchos problemas en el hombro y se aferró
.
De esta forma, Sánchez se convirtió en el segundo mexicano en ganar una presea de plata en la plataforma individual de 10 metros, luego de que Gaxiola la conquistó hace 48 años. Jesús Mena fue bronce en Seúl 1988 en la misma especialidad.
En total, los clavados suman 14 metales en su historial, para ser el deporte que más medallas ha dado a México en este tipo de certámenes.
Iván García estaba desconsolado y rompió en llanto cuando realizó su última ejecución. El Pollo había calificado en el segundo lugar de las semifinales. Sin embargo, el único clavadista del mundo con la ejecución de más alto grado de dificultad falló en la ronda decisiva para ocupar el décimo sitio (418.95).
No tengo pretextos ni palabras para pedir perdón a las personas que confiaron en mí. El resultado no fue lo que esperaba, no salió
, comentó resignado.
Sobre su futuro hacia los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, el joven tapatío respondió: Hay revanchas y, como digo, de nuevo a chingarse por otro ciclo
.
El oro se lo llevó el chino Chen Aisen (585.30), quien aportó a su nación la séptima dorada en las ocho pruebas disputadas en Río, para destronar al campeón David Boudia, de Estados Unidos (525.25), quien erró su último clavado ante un asiático que rebasó tres veces los 100 puntos y dejó a los demás que se pelearan el resto de las preseas.
La final deparó sorpresas en la alberca Maria Lenk. El puertorriqueño Rafael Quintero hizo historia al ser el primer exponente de su país en llegar a estas instancias. Entrenado por el mexicano Omar Ojeda, el boricua terminó séptimo (485.35).
En tanto, el británico Thomas Daley se quedó en las semifinales al terminar último (18), sin poder repetir el podio de Londres 2012.