Río de Janeiro.

Brasil arrolló 3-0 a Rusia y avanzó a la final del voleibol masculino de Río 2016, en la cual se medirá ante Italia, para tratar de conquistar el oro que se le escapó en los dos Juegos Olímpicos pasados.

Este viernes, el equipo carioca se vengó de su verdugo en la final de Londres 2012, con parciales 25-21, 25-20 y 25-17, en apenas una hora y 23 minutos, y llevó al éxtasis a una torcida que durante todo el torneo fue incondicional, colmando en cada uno de sus partidos el estadio Maracanazinho.

El mejor jugador por los auriverdes fue el atacador Wallace de Souza, quien marcó 13 puntos. Como detalle revelador, Brasil sólo cedió 10 unidades por errores no forzados. Fue el mismo Wallace quien calentó la mano temprano en el partido e imprimió intensidad a los sudamericanos.

No obstante, Rusia respondió levantando pelotas imposibles que le permitieron pegarse a su rival en el marcador hasta pasada la mitad del primer set, donde los hombres de Bernardinho apretaron el acelerador para llevárselo por 25-21.

Con Lucarelli y Lipe en cancha desde el inicio del partido y pese a las dolencias musculares que sufrieron tras el duelo contra Argentina en cuartos de final, Brasil arrancó lento en el segundo set y su rival tomó una ligera ventaja.

La estirpe de campeón de los brasileños se impuso en los puntos finales del set, y los dirigidos por Vladimir Alekno entregaron el parcial por 25-20, con lo que desataron el primer estallido de la torcida.

Con dos sets de ventaja se repetía la situación de la última final olímpica, pero esta vez tuvo un desenlace feliz para el conjunto anfitrión.

Disputado e intenso, como todo el partido, arrancó el tercer set, pero los brasileños controlaron el juego ruso, y los tantos de Maxim Mikhaylov no fueron suficientes para detener el impulso auriverde.

Con varios jugadores rayando a gran nivel y un acertado Bruno, armador y capitán del equipo, Brasil se transformó en huracán que desmoronó a la fortaleza rusa para firmar la victoria 25-17.

Atrás quedaron la angustiante clasificación en el cuarto lugar de su grupo y los momentos de tensión ante Argentina en cuartos; luego, el Maracanazinho se volcó festejar con sabor a carnaval. Creo que Brasil jugó el mejor partido en este torneo ante un rival de alto nivel, comentó el entrenador carioca, Bernardinho al término del encuentro.

La final entre Brasil e Italia, que más temprano se impuso 3-2 a Estados Unidos en la otra semifinal, se disputará este domingo en ese mismo estadio. Estados Unidos y Rusia se enfrentarán por la medalla de bronce ese mismo día, cuando también se llevará a cabo la clausura de los Juegos Olímpicos de Río 2016.