El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, señaló ayer que los planteamientos de Donald Trump, candidato a la presidencia de Estados Unidos por el Partido Republicano, han sido discriminatorios de la migración y no impulsan principios fundamentales, como el respeto a los derechos humanos, por lo cual merecen la condena y la necesidad de que se reviertan.

Al dictar una conferencia sobre la integración regional en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, destacó que el empresario no ha entendido la contribución de los pueblos latinoamericanos en las dinámicas culturales del hemisferio.

Frente a estudiantes de relaciones internacionales reunidos en el auditorio de la casa de estudios, Almagro expuso que cuando estas posiciones se van afirmando en el esquema de campaña, se transforman en algo más peligroso.

Ante tal situación tenemos que ser muy claros y precisos a la hora de condenar y pedir los ajustes que son necesarios para que una campaña tenga también esquemas de principios y valores más allá de los intereses políticos y circunstanciales que puedan haber.

El secretario general de la OEA informó que Estados Unidos, por primera vez en su historia, solicitó a la organización una misión de observadores electorales para los comicios de noviembre próximo. Este es un paso histórico, pues el que confíe en la capacidad de escrutinio del organismo multilateral le da a éste mucho respeto y consideración. Destacó que los enviados a la jornada electoral actuarán con absoluta imparcialidad.

Por otra parte, subrayó que la crisis financiera de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) se ha resuelto 99 por ciento, pues se hicieron pedidos específicos a los países de contribuciones directas.

Tras darse a conocer el problema económico del organismo, producto de que cayeron las aportaciones voluntarias de países que no son de la región, señaló que la OEA ajustó su presupuesto 20 por ciento, pero esta reducción no se aplicó a la CIDH ni a la corte interamericana.

El uruguayo resaltó que la comisión tiene asegurado financiamiento para realizar su trabajo con normalidad hasta comienzos del próximo año y confió en que en marzo se pueda lograr la continuidad de los fondos que recibe.

Por lo que hace a la relación de México con la OEA, dijo que es muy intensa, no sólo por las contribuciones que hace, sino también por los problemas que el país tiene. Llamó la atención sobre el hecho de que el Estado mexicano, a diferencia del venezolano, está abierto al escrutinio internacional, tanto en procesos electorales como en su dinámica de derechos humanos.

Ante la crisis política y humanitaria del país sudamericano consideró que el camino que queda es recurrir al referendo revocatorio y hay tiempo suficiente para que se realice en este año.