Río de Janeiro.

La estadunidense Simone Biles, destinada a ser una de las grandes estrellas de los Juegos Olímpicos, se tambaleó hoy en la barra de equilibrio y perdió la oportunidad de aspirar a cinco oros en gimnasia, donde ya ganó tres.

De todas formas, la brillante atleta nacida en Columbus, Ohio, logró acceder al podio con el bronce. El primer lugar fue para la holandesa Sanne Webbers con 15,466 puntos y la plata para la estadunidense Lauren Hernández con 15,333. Biles, quien había llegado como la mejor de la ronda clasificatoria con una puntuación de 15,633, terminó con 14,733 en la final después de tambalearse. Sus tres oros en los primeros que compite: ganó el concurso general individual, caballo de salto y la prueba por equipos con las demás gimnastas de Estados Unidos. Le falta competir en suelo.

La expectativa de que se llevara los oros de las cinco finales a las que se clasificó fue alimentada por su enorme trayectoria de los pasados tres años, en los que acumuló diez títulos mundiales. Además, en Río pasó en primer sitio a las finales, salvo en barras asimétricas, donde no se clasificó.

Sentada en la banca, a la espera de que pasaran todas las competidoras, Biles se veía seria ya que tuvo que esperar casi hasta el final para saber si lograba retener el tercer sitio. Ya en el podio inspiró profundo, resignada y casi sin sonreír, después de que se colgara el bronce.

En varones, el brasileño Arthur Zanetti no pudo revalidar el primer oro de la gimnasia latinoamericana al acabar en segundo lugar la final de anillos (15,766), donde se impuso el griego Eleftherios Petrounias con 16,000 puntos en una competición muy tensa que se resolvió en el último segundo. El bronce fue para el ruso Denis Abliazin con 15,700.

Ri Se-Gwang se convirtió en el primer gimnasta de Corea del Norte en ganar un título olímpico en salto, al imponerse con un puntaje de 15,691 en la final, donde el chileno Tomás González, el único latinoamericano en competencia, fue séptimo. El bicampeón del mundo también se convirtió en el segundo hombre de su país en ganar un título olímpico en gimnasia tras el triunfo de Pae Gil-Do en el caballo con arzones en los Juegos de Barcelona 1992.

El ruso Denis Abliazin, quien venía de hacerse con el bronce en anillos, se quedó con la plata (15,616) y el japonés Kenzo Shirai logró el bronce con 15,449, tras superar al rumano de 35 años Marian Dragulescu por la regla de desempate luego de que ambos recibieron el mismo puntaje. Esta medalla de oro es una alegría para mi país y pienso que llevará una sensación de victoria y coraje a todo mi pueblo, dijo Ri, quien describió la presea como el mejor momento de su carrera.