Analistas bajan expectativa de crecimiento para este año de 2.3 a 2.17 por ciento
La inversión se verá limitada no sólo por bajo nivel de confianza, sino por recorte presupuestal
Domingo 7 de agosto de 2016, p. 19
Las fuentes de crecimiento económico del país parecen agotarse
puesto que la caída en la confianza tanto de los consumidores como de empresarios son elementos que contribuirán a la desaceleración que sufrirá la economía mexicana durante la segunda mitad del año, advirtió el Centro de Investigación en Economía y Negocios (Cien), del Tecnológico de Monterrey.
Existe consenso entre analistas en bajar las expectativas de crecimiento económico para 2016 a 2.17 por ciento desde 2.3 por ciento previo. La expectativa de crecimiento del producto interno bruto (PIB) para 2017 se mantiene en 2.60 por ciento.
Especialistas financieros consideraron que el nivel esperado de la inflación para 2016 sigue siendo muy inestable por los recientes incrementos en los precios de las gasolinas, electricidad y gas, por lo que podría superar 3.2 por ciento este año.
Hacia el cierre de 2017 la inflación general podría estabilizarse en 3.41 por ciento anual al cierre de ese año, señalaron los analistas del grupo Scotiabank.
De acuerdo con el Cien, la inversión se verá limitada no sólo por los bajos niveles de la confianza empresarial, sino también por los ajustes realizados al Presupuesto de Egresos, en particular a las obras de infraestructura, mientras el consumo privado se deteriorará en la segunda mitad del año ante la caída en las expectativas de los consumidores en cuanto a la evolución de la economía nacional, la cual retrocedió 3.6 por ciento anual en julio, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Los analistas del Cien opinaron que ambos indicadores juegan un papel importante en dos factores cruciales para el crecimiento económico: el consumo y la inversión
.
Al deterioro que muestran las encuestas del Inegi se suman las advertencias del sector empresarial, que el jueves pasado amenazó con dejar de invertir 50 mil millones de pesos y no participar en el desarrollo de las zonas económicas especiales si no se resuelve el conflicto magisterial, iniciado por el intento gubernamental de imponer la reforma educativa y que ha derivado en bloqueos carreteros y de vías férreas por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Aunque la Secretaría de Economía (SE) asegura que hasta el momento no ha habido problemas de desabasto en el país derivados de dichas acciones y que también se desconoce la cifra de pérdidas económicas provocadas por el conflicto, el fin de semana pasado el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp) estimó en 4 mil 200 millones de pesos las afectaciones provocadas por las protestas.
El Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) informó a principios de semana que el mercado interno tiene cierto dinamismo, pues las ventas de automóviles mantienen un ritmo de crecimiento sólido de 18.5 por ciento en los primeros seis meses del año frente al mismo lapso de 2015 y las ventas reportadas por la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD) avanzaron 5.3 por ciento en junio de este año en comparación con igual lapso de 2015.
El reporte de ANTAD señala que al cierre del primer semestre las ventas acumuladas aumentaron casi 15 por ciento en comparación con el periodo de enero a junio del año pasado, lo cual puede estar asociado a la expansión del crédito bancario, al consumo, a las remesas familiares y a una mayor generación de empleo
, consideró el IMEF.
Sin embargo, agregó que en lo que resta del año habrá un escenario mixto
por los recortes al gasto público y a la volatilidad del peso.
A esto se suma el impacto negativo al comercio y a los servicios, como resultado de los obstáculos de abasto que se están registrando en algunos estados del país
, adelantó el instituto.
De acuerdo con el Sistema de Indicadores Cíclicos que elabora el Inegi la economía mexicana está dando muestras de que comienza a desacelerarse, pues tanto el indicador coincidente como el adelantado han registrado decrementos en todos los meses del año de enero a mayo.
El Cien agregó que ante un escenario donde la confianza empresarial se encuentra significativamente deteriorada, las implicaciones negativas en la evolución de la inversión no se hacen esperar, pues durante los primeros cinco meses del año la inversión fija bruta creció apenas 0.9 por ciento, cifra que contrasta con 4.9 obtenido durante el mismo periodo de 2015.
Los especialistas del grupo financiero Banamex mantienen la expectativa de inflación al cierre de 2016 en 3.20 por ciento. En tanto, la expectativa de la inflación subyacente prácticamente se mantiene sin cambios en 3.21 por ciento anual desde 3.20 por ciento previo.
A su vez, los especialistas del Grupo Financiero Santander estimaron que en julio los precios al consumidor registraron un incremento de 0.34 por ciento, con lo cual la tasa anual se ubicaría en 2.74 desde 2.54 por ciento en junio.
Para el índice subyacente calculamos una variación de 0.19 por ciento que llevaría a una tasa anual de 2.99 por ciento desde 2.97 por ciento en junio.
Consideraron que en julio se registraron presiones de alza estacionales en los precios de los servicios turísticos y de transporte aéreo, además de alza en precios de gasolina y transporte urbano. A la baja, estarían los precios de algunos productos agropecuarios, así como de los servicios de telefonía móvil.
El Grupo Financiero BBVA Bancomer advirtió además que el peso mexicano ha continuado debilitándose en lo que va del año, por lo cual prevemos que al traspaso del tipo de cambio al precio de las mercancías le falta recorrido
.
Tan sólo para julio calculó que los precios de bienes y servicios en el país repuntaron 2.72 por ciento a tasa anual, en contraste con 2.54 por ciento de junio, previsión que tendrá que constatarse esta semana con las cifras oficiales.
Alimentos caros
En el martes próximo el Inegi publicará el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), es decir la inflación, correspondiente a julio, así como el indicador mensual de la actividad industrial por estado.
Durante el primer semestre del año, la inflación general fue de 2.54 por ciento comparada con igual periodo del año pasado, pero la de alimentos fue de 4.14 por ciento, la del gas doméstico (LP y natural) llegó a 3.12 por ciento y la de ropa y calzado llegó a 3.04 por ciento.
Si bien los precios de la electricidad, así como los de las gasolinas y aceites lubricantes todavía resultaron más baratos en 1.93 y 2.32 por ciento respecto a junio del año pasado, el más reciente comparativo de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), publicado hace unos días, indica que México se ubicó como el tercer país entre los 35 asociados al organismo donde los alimentos se encarecieron más en junio, sólo superado por Chile y Turquía, que tuvieron incrementos de 4.7 y 6.6 por ciento, en tanto que fue el que menos reducción de precios tuvo en los energéticos, pues fue de menos 1.5 por ciento cuando el promedio del grupo fue de 7.1 por ciento y en Estados Unidos hasta de 9.4 por ciento, y en países como Luxemburgo, España y Japón de más de 11 por ciento.