La multa impuesta al Partido Verde por un fraude relacionado con cientos de miles de playeras que nunca recibió, quedará reducida en 40 por ciento al pasar de 88.5 millones de pesos a unos 53 millones de pesos.

Por decisión del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) deberá borrarse el agravante de dolo de dicha resolución, que involucra 35.5 millones de pesos que dicho partido político se ahorrará de su cuantiosa lista de adeudos.

Aunque el Tribunal Electoral les perdonó esa cantidad, los verdes rozarán los 300 millones de pesos en adeudos al INE, y con ello seguirán encabezando la lista de los más multados en lo que va del año, seguidos del PRD.

El tribunal electoral si bien corroboró que el PVEM cometió todas las ilegalidades señaladas por el instituto, concluyó al mismo tiempo que el INE actuó de forma ilegal al incrementar el monto de la sanción en 100 por ciento y le ordenó individualizar de nuevo la sanción.

Cuatro magistrados de dicho tribunal acordaron en su sesión del 29 de julio este asunto, que casi pasó inadvertido, porque se hizo mención de manera apresurada y no hubo debate entre el presidente Constancio Carrasco, María del Carmen Alanís, Manuel González Oropeza (quien fue el ponente del proyecto) y Flavio Galván. No asistieron Pedro Esteban Penagos ni Salvador Nava Gomar.

El INE resolvió el 16 de diciembre imponer a los verdes el pago de 88.5 millones de pesos por realizar una operación inmobiliaria ilegal para compensar un pago ocultado al INE de cientos de miles de camisetas que nunca recibió, trama en la que estuvieron involucrados los hermanos Adrián y Arturo Escobar y Vega.

La compleja historia sobre esta investigación, dada a conocer por La Jornada el año pasado, se inició en 2010. Al entonces Instituto Federal Electoral (IFE) le despertaron dudas una serie de pagos hechos por el Verde por unas escrituras de las que no había evidencia.

Finalmente halló que eran de un inmueble escriturado a nombre de Marco Antonio de la Mora Torreblanca, ex dirigente del PVEM en Guerrero y suplente de Arturo Escobar en la pasada legislatura de la Cámara de Diputados.

Dicho terreno ubicado en Iztapalapa se dio a cambio de 763 mil 599 camisetas no entregadas, por las que se pagaron los 11.2 millones de pesos a la empresa Grupo Textil Joad, de la que era accionista Adrián Escobar, hermano del ex vocero del Verde.

Los magistrados del tribunal electoral corroboraron la esencia de esta historia, al determinar las siguientes ilegalidades cometidas por el Verde: recibió una aportación en especie de una persona no identificada, además omitió reportar dichas operaciones en su informe de 2009 por una cuenta por cobrar que no se recuperó.

No obstante ello, el TEPJF concluyó en su sentencia que no se acreditó el dolo, o sea, la intención de aparentar una cosa que es real, con el propósito de lograr un beneficio, para hacer creer que se cumple con las obligaciones de ley tratando a la autoridad administrativa legal.