Especialistas harán una investigación en Guanajuato, Zacatecas, Chiapas, Jalisco y Durango con el fin de encontrar y reproducir las mejores prácticas de los maestros en escuelas rurales de zonas marginadas para prevenir el fracaso escolar.

Normalmente en la academia tendemos mucho a evaluar y mostrar lo que no funciona bien, de modo que tenemos una enorme cantidad de estudios sobre el fracaso en cualquier tipo de políticas públicas, señaló Diego Juárez Bolaños, responsable del proyecto que tiene financiamiento del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y de la Subsecretaría de Educación Básica de la SEP.

Precisó que con esta investigación se busca lo contrario: encontrar no sólo a los maestros, sino las zonas escolares rurales en las que se trabaja bien.

Juárez Bolaños es investigador nacional nivel uno adscrito al Instituto de Investigaciones para el Desarrollo de la Educación, de la Universidad Iberoamericana, y encabeza al equipo formado por los expertos Francisco Urrutia, del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente; Cenobio Popoca, de la Benemérita Escuela Nacional de Maestros; Martha Azaola, de la Universidad de South Hampton (Reino Unido), y la investigadora independiente Paola Arteaga.

Un año de estudios

El estudio se realizará a lo largo de 12 meses en zonas escolares de los estados señalados, particularmente en planteles inmersos en un contexto de marginación y pobreza. Una zona escolar incluye entre 10 y 15 escuelas, indicó Juárez Bolaños.

Queremos encontrar por qué en condiciones rurales de pobreza y marginación existen grupos de maestros con buenas prácticas, dijo.

Como resultado, además de una publicación, los investigadores realizarán un video que plasme los datos más importantes que se hayan recopilado. También impartirán un curso presencial y virtual para exponer las buenas prácticas detectadas y así reforzar la formación de los profesores en zonas rurales y atacar el rezago educativo.