La instalación de la tienda viola normas de protección al abasto popular, señala
Prosigue la remodelación del edificio de cuatro niveles para el centro comercial
Sábado 30 de julio de 2016, p. 27
La diputada local de Morena en la Asamblea Legislativa (ALDF) Citlalli Hernández Mora demandó en los juzgados de distrito en materia administrativa del Poder Judicial de la Federación un amparo contra la instalación y operación de una tienda Chedraui en la calle Sur 16 número 271 de la colonia Agrícola Oriental, a unos metros del mercado público, del cual dependen unas 500 familias que serán afectadas por la competencia desleal
del centro de autoservicio.
La legisladora explicó que la demanda se sustenta en la violación a diversas disposiciones destinadas a la protección y promoción de los centros de abasto popular de la ciudad, así como del derecho al empleo de quienes realizan allí sus actividades, pero que no han sido suficientes para detener los trabajos de remodelación en el inmueble, frente al cual los vecinos instalaron un plantón desde hace un mes.
Recordó que la ALDF emitió una norma para proteger a los mercados públicos de la capital, así como a las misceláneas y otros pequeños establecimientos, donde se indicaba como límite para la instalación de tiendas de autoservicio una distancia no menor a 900 metros; sin embargo, las grandes cadenas de autoservicio obtuvieron una sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que declaró su invalidez.
Advirtió que la tienda pretende operar con un horario de 24 horas, lo que no sólo tendrá un impacto negativo en las ventas de los 350 locales comerciales del mercado Agrícola Oriental, sino a las tiendas y otros comercios de la zona.
La Agrícola Oriental se caracteriza por ser una colonia de comercio, muchas familias viven de él, ya sea en el mercado, en establecimientos y pequeños locales y puestos que hay en los alrededores, por lo que tener en esa zona un Chedraui que abra las 24 horas definitivamente va a afectar la economía popular
, apuntó.
Hernández Mora denunció la insensibilidad
del gobierno central y de la delegación Iztacalco, que están obligados a generar acciones que permitan fortalecer la economía de los barrios y al permitir la instalación de empresas como ésta atentan contra esa responsabilidad, lo que genera incertidumbre en quienes tienen su sustento en una actividad comercial desde hace varias generaciones.
En abril pasado, el pleno de la ALDF dirigió un exhorto a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda para iniciar un juicio de lesividad para cancelar todos los permisos y autorizaciones que se dieron al particular y detener en definitiva los trabajos que se realizan de adecuación de un inmueble de cuatro niveles para albergar a la tienda de autoservicio.