Fort Lauderdale. Un hombre que asistía a la mezquita frecuentada por Omar Mateen, autor de la matanza del club gay Pulse, en Orlando, Florida, fue víctima de una paliza este fin de semana, informaron autoridades. Un sospechoso fue detenido, agregaron. El Consejo de Relaciones Islámico-Estadunidenses (CAIR, por sus siglas en inglés) dijo que el atacante profirió insultos racistas, aunque las autoridades indicaron que hasta el momento no tienen indicios de ningún comentario sobre la raza, aunque señalaron que la investigación continúa abierta. La policía indicó que un hombre que sangraba por la boca fue encontrado. El individuo relató que se le acercó un sujeto, quien le preguntó qué estaba haciendo y luego lo golpeó varias veces en la cara y la cabeza. El agresor abandonó el lugar, pero un agente de tránsito lo detuvo minutos más tarde y la víctima identificó positivamente al conductor como el hombre que lo había atacado. El sospechoso fue identificado como Taylor Anthony Mazzanti, de 25 años, quien fue arrestado y acusado del delito de agresión. Se le impuso una fianza de 3 mil 750 dólares. El padre de Mateen figura entre los aproximadamente 100 fieles que acuden a la mezquita. Omar Mateen asistía a veces al rezo del viernes, pero no socializaba con los demás. Mateen irrumpió la madrugada del pasado 12 de junio en el Pulse con un rifle de asalto y mató a 49 personas e hirió a más de 50, en la que ha sido la peor matanza a tiros en Estados Unidos.

San Salvador. La violencia ha disminuido sensiblemente en El Salvador este año, descenso que el gobierno del presidente Salvador Sánchez Cerén atribuye a una nueva cruzada contra las pandillas, que lanzó en marzo pasado con una fuerza de seguridad y aislando a los jefes en una cárcel de máxima seguridad. Las pandillas consideran que la cifra de ejecuciones se redujo gracias a una tregua entre las también llamadas maras. Un pandillero dijo a Ap que la disminución se debe a una orden que las bandas dieron a sus estructuras para cesar los homicidios, en lo que consideran una muestra del control que mantienen sobre sus miembros. En todo caso, durante mayo pasado se reportaron 351 asesinatos, y 353 en abril y 611 en marzo. El número actual, sin embargo, es alto todavía: la tasa de homicidios fue tan elevada el año pasado, que aunque se haya reducido actualmente a la mitad aún colocaría a El Salvador en los primeros 10 lugares de los países que tienen el mayor número de ejecuciones sin estar en guerra.