Londres.

Joe Pizarro, un hooligan inglés, fue condenado a cinco años sin poder asistir a un partido de futbol por su presunta implicación en los graves enfrentamientos contra hinchas rusos, antes del Inglaterra-Rusia de la Eurocopa, el pasado 11 de junio.

El aficionado de 34 años fue identificado por la policía británica en las imágenes de la gresca en el centro de Marsella que protagonizaron las dos aficiones, que terminó con 35 heridos, la mayoría ingleses, dos de ellos en coma.

El grueso de fanáticos que viajó a Francia se comportó bien y disfrutó del torneo, dijo el superintendente de la policía, Andy Barnes, aunque una pequeña minoría estuvo envuelta en los altercados. No lo toleraremos.

En Moscú, el ultranacionalista ruso Alexandre Chpryguin, expulsado dos veces del país galo en menos de una semana, criticó el fracaso de las autoridades en la gestión de los episodios violentos en el inicio del torneo, provocados por los ingleses, según él.

Su versión se opone a la del fiscal de Marsella, Brice Robin, la semana pasada: los enfrentamientos fueron provocados en gran parte por hinchas rusos, particularmente violentos, que quisieron demostrar su supremacía sobre los aficionados ingleses.