La Comisión Permanente del Congreso de la Unión acordó integrar una comisión plural de diputados y senadores que dé seguimiento a los hechos del 19 de junio en Nochixtlán, Oaxaca, donde perdieron la vida nueve personas y decenas resultaron heridas.

Desde la mañana, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) maniobró para que no fueran citados a comparecer los secretarios de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y de Educación, Aurelio Nuño, así como el gobernador de Oaxaca, Gabino Cué, como lo pedían los grupos parlamentarios de los partidos de la Revolución Democrática (PRD), Acción Nacional (PAN), del Trabajo (PT) y Morena, y por ello el acuerdo final fue sólo solicitar un informe a los funcionarios.

Asimismo, se incluyó en el documento de consenso que la comisión pueda llevar a cabo las reuniones de trabajo que considere necesarias con las autoridades pertinentes.

De igual forma, la Permanente condenó enérgicamente los hechos violentos de Nochixtlán y manifestó su solidaridad con los heridos y expresó sus condolencias a los deudos de las personas fallecidas.

Dos horas de ríspidas discusiones

Lo que el PRI no pudo evitar, fue la ríspida discusión que durante dos horas se llevó a cabo ante el pleno de la Comisión Permanente. Los diputados de Morena pidieron incluso la remoción del secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño, y acusaron que la Policía Federal llegó a Oaxaca con la orden de reprimir a los maestros inconformes con la reforma educativa.

Ante las críticas de Morena, PRD, PT y PAN, a las autoridades, el diputado Jorge Carlos Ramírez Marín subió a la tribuna a defender al gobierno y al titular de la SEP: Oaxaca tiene 15.7 por ciento de analfabetismo, tres veces que la media nacional, no se construyó en un año, no podemos achacar la situación a Aurelio Nuño, porque él tiene un año en el cargo.

En tanto, en conferencia de prensa, el coordinador del PRD, Miguel Barbosa, exigió al gobierno federal dar la cara y que el presidente Enrique Peña Nieto asuma una posición pública, ya que la situación es muy grave, como para que sólo se refiera a ella a través de su cuenta de Twitter.

Dijo, asimismo, que la respuesta de la autoridad no puede ser la cerrazón y las soberbia, mucho menos la represión a quien pide diálogo.