Aun cuando hay voces que llaman a ello, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) no se polarizará ni tomará partido tras los hechos de violencia en Oaxaca, expresó el rector de la casa estudios, Enrique Graue Wiechers.

Durante una reunión con el Colegio de Directores, que se efectuó ayer, aseveró que en el ambiente enrarecido que se vive en el país se debe avanzar hacia un nuevo clima de concordia.

El rector señaló que como institución la UNAM repudia el uso de cualquier expresión de violencia y apuntó que lo que se vivió en Oaxaca es fruto de la radicalización, de la sinrazón, la intolerancia, así como de la incapacidad para dialogar y de lograr los acuerdos necesarios para transitar en las diferencias hacia la armonía que requiere nuestra nación.

Advirtió que sostener posiciones irreductibles puede conducir a una escalada de violencia que nadie desea y es contraria a los intereses de México y de los mexicanos.

Graue Wiechers subrayó que sólo los acuerdos y los consensos entre las partes dentro del marco de la ley, del respeto a las diferencias, del diálogo constructivo y de la razón podrán dar como resultado el verdadero proyecto de nación que el país se merece y al que los mexicanos aspiramos. Indicó que los recientes acontecimientos (en Oaxaca) no pueden ni deben repetirse en nuestro país.