París.

Los desmanes protagonizados por hinchas de Hungría antes del partido de la Eurocopa en Marsella le costarán a la federación de futbol de su país una multa de 73 mil dólares, anunció la UEFA.

Poco antes del cotejo disputado el pasado sábado contra Islandia, aficionados húngaros se enfrentaron con personal de seguridad y policías en el Stade Vélodrome, al intentar escalar una cerca para ubicarse detrás de un arco. Fue el mismo sector en que seguidores rusos agredieron a simpatizantes ingleses la semana anterior.

Durante el transcurso del cotejo, los fanáticos de Hungría arrojaron bengalas tres veces: durante la entonación de los himnos nacionales, cuando se pitó un penal en favor de los islandeses y luego de que su equipo empató 1-1 cerca del final.

En Marsella, cuatro sujetos fueron detenidos ayer en el Viejo Puerto durante un breve enfrentamiento antes del partido Ucrania-Polonia, indicó la policía.

El presidente ucranio, Petro Porochenko, dijo a su llegada a Francia que los hooligans rusos responsables de los graves disturbios en Marsella los días 10 y 11 de junio son combatientes entrenados, que matan, de acuerdo con la traducción de sus palabras del canal francés iTéLé.

Por la mañana, en Burdeos, un mochila sospechosa, que se temió contuviera un artefacto explosivo, puso en alerta a la selección española, ya que se encontraba a unos 50 metros de la puerta del hotel donde se hospeda, en un carrito de autoservicio.

La policía francesa acordonó inmediatamente la zona y el hotel, para después reabrir el paso a transeúntes y automóviles, tras una minuciosa revisión de grupos especializados, que determinaron que no había ningún peligro.