La confrontación entre consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) por las presidencias de las comisiones se agudizó ayer. José Roberto Ruiz Saldaña advirtió a sus pares que si lo obligan a permanecer en la Comisión de Quejas va a escalar el conflicto jurídicamente y los invitó a serenarse.

Previamente, su colega Marco Antonio Baños señaló a La Jornada que volverán a nombrar a Ruiz Saldaña integrante de dicha comisión porque los servidores públicos no tenemos facultades de actuar caprichosamente.

Ruiz Saldaña replicó al respecto: Sostengo que por el bien de la institución le den vuelta a la página, toda vez que si una mayoría de consejeros y consejeras me obliga a permanecer en la Comisión de Quejas y Denuncias significaría que quieren una escalada en el conflicto, a lo cual no temo, pero no me quiero ver obligado.

El miércoles pasado dicho consejero renunció a integrar dicha comisión como acto de protesta porque ocho de 11 consejeros aprobaron seguir presidiendo tres meses más ocho comisiones, al margen de la ley electoral, que establece su duración en sólo un año.

Ayer le hizo un llamado al consejero presidente, Lorenzo Córdova, para que invite a sus pares a ver para adelante y no pretendan profundizar las diferencias.

Yo los invito a serenarse y a ahorrarse descalificaciones como las que ayer recibí en mesa de consejeros, insistió.

Acerca de Baños opino que el consejero debe serenarse y no sobreactuar con su mayoría en un asunto ya discutido y en el pasado, respondió.

Horas antes, Baños señaló: yo creo honestamente que el Consejo General debe nombrar a Ruiz Saldaña. Los servidores públicos no tenemos facultades de actuar caprichosamente en la función pública. Hoy me enojo y ya no quiero cumplir con mi trabajo.

Entrevistado en el Instituto de Investigaciones Jurídicas, donde acudió a un seminario electoral, consideró que la decisión de su homólogo es cosa rara y anticipó que revisarán el tema el próximo martes en la reunión conocida como mesa de consejeros.

Ruiz Saldaña ha provocado en dos ocasiones agrios debates en el INE al denunciar su exclusión y acuerdos entre Lorenzo Córdova y el grupo del consejero Baños, al que ha llamado G-5, para el reparto de las presidencias de dichas comisiones, que llevan la batuta de los trabajos en el instituto.

Además, ha sido una voz disonante en la Comisión de Quejas desde 2014. Se ha opuesto a la censura de espots y este año criticó un par de criterios del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, avalados por sus colegas Adriana Favela y Beatriz Galindo, que impidieron que varios promocionales se difundieron en radio y televisión, por considerar que eran una práctica de censura previa, lo cual está prohibido por la Constitución.