Un conato de bronca entre internos de los dormitorios 3 y 2 del penal de Barrientos –ubicado en Tlalnepantla, estado de México, donde el lunes hubo un motín–, quienes se disputaron celdas que dejaron reos reubicados hacia otros reclusorios, obligó a desalojar ayer a familiares que llegaron a visita y a movilizar a 50 policías estatales.

Pasadas las 17 horas del jueves corrió el rumor de un nuevo enfrentamiento en el penal, llamado oficialmente Juan Fernández Albarrán. La oficina de prensa de la Comisión Estatal de Seguridad Ciudadana mexiquense, aclaró que no hubo motín, sino un conato de bronca entre reos.

Luego del incidente del lunes pasado, autoridades de la dirección estatal de reclusorios promovieron la reubicación de 48 internos peligrosos del penal de Barrientos a otros centros penitenciarios. Los familiares de convictos acusaron que desde el día del motín los internos enfrentan reducción de alimentos, no hay agua potable ni electricidad, se les mantiene desnudos y les aumentaron las cuotas hasta por hacer llamadas telefónicas.