Tolerancia a prueba
o se puede escatimar el triunfo que obtuvo en las urnas Martín Orozco Sandoval, candidato del PAN a la gubernatura de Aguascalientes, el pasado 5 de junio. Los resultados preliminares cerraron con una ventaja en su favor de poco más de 9 mil votos y los resultados oficiales indicaron que le ganó a Lorena Martínez Rodríguez, candidata de la coalición PRI-Verde-PT y Nueva Alianza, por 13 mil 565 votos.
El Instituto Estatal Electoral ya entregó a Orozco Sandoval su constancia de mayoría y lo declaró gobernador electo. Sin embargo, el lunes, Lorena Martínez anunció que impugnará la elección; el eje de su discurso fue la obligación que tiene una sociedad democrática de cuidar a las instituciones electorales, la vigencia del estado de derecho y contribuir a elevar la calidad de nuestra democracia.
En la normalidad democrática a la que aspiramos no debería haber sobresaltos por esta impugnación, los tribunales deberán decidir no sobre el triunfo de Martín Orozco sino sobre el cómo. La candidata del PRI indicó: Vamos a defender que la ley electoral se respete, pero algo más importante: vamos a defender que la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos se respete en Aguascalientes y en México
, en referencia a la intervención de la Iglesia católica y la promoción del voto de castigo contra el partido de Enrique Peña Nieto y su iniciativa en favor del matrimonio igualitario.
Sobre lo que deberán decidir los tribunales incluye si se permitirá a las agrupaciones conservadoras y a la Iglesia seguir con la promoción de un discurso de odio, proclamando la amenaza de incidir en la elección de 2018 al dividir a la sociedad de forma maniquea entre quienes defienden un modelo único de familia y quienes reconocemos la diversidad de nuestra sociedad. De nueva cuenta, Aguascalientes es un laboratorio donde se pondrá a prueba nuestra tolerancia y madurez. A ver cómo nos va.
Twitter: @jornadags
