Fue visitado por el ministro de Relaciones Exteriores alemán
Domingo 5 de junio de 2016, p. 33
Hace apenas cinco años la hermana María Magdalena Silva Rentería fundó la Casa de Acogida, Formación y Empoderamiento de la Mujer Indígena e Inmigrante (Cafemin) y el modelo de atención ya es referencia para países con alto número de migrantes en búsqueda de refugio, como Alemania.
Ayer el ministro federal de Relaciones Exteriores de aquel país, Frank-Walter Steinmeier, visitó las instalaciones del albergue en la Ciudad de México, donde se reunió con Silva Rentería, para saber cómo están apoyando a los migrantes, quienes en su mayoría provienen de Honduras, El Salvador y Nicaragua.
Ahí escuchó las historias de algunos habitantes pasajeros del lugar. Si bien Cafemin fue creada para alojar a mujeres, también reciben familias con niños e incluso a varones solos que llegan huyendo de la violencia en su país.
Sergio, de Honduras –quien también busca refugio en México–, relató que “cuando los mareros dicen que te van a matar, te van a matar, no importa a qué parte de tu país vayas”.
Steinmeier está en México para la inauguración, mañana lunes, del año dual México- Alemania, y adelantó su viaje para reunirse con Silva Rentería. Hace un mes los gobiernos de ambas naciones firmaron un convenio de cooperación para prevenir el traslado de niños no acompañados de Guatemala, El Salvador y Honduras.
Con este acuerdo se promoverán políticas públicas que arraiguen a los menores de edad en sus lugares de origen.
En esos países viven una crisis humanitaria, la delincuencia es la que manda
, y si no se combate ese fenómeno, los éxodos continuarán, manifestó en entrevista la hermana Magda, como la llaman en el refugio. La política migratoria mexicana está dictada por Estados Unidos, y lo que le exige es deportar
a los migrantes para evitar que lleguen a su territorio, señaló.
Por ello, indicó, es casi imposible
que la Comisión Mexicana de Ayuda a los Refugiados (Comar) les otorgue el asilo. Uno de cada 10 lo consigue. Está rebasada ante los más de 360 mil que transitan por este país. Además, los criterios que utilizan para concederlo pareciera que son discrecionales
.
A diferencia de Europa, dijo Steinmeier en una breve declaración a medios alemanes, la migración en esta parte de América Latina se debe principalmente a la violencia y no a cuestiones económicas.