La cantante estadunidense cerró el Oasis Jazz Festival, realizado en Cancún
Lunes 30 de mayo de 2016, p. a10
Cancún.
El pasado sábado, la cantante estadunidense de jazz, funk y soul Chaka Khan hizo un esfuerzo por dar un espectáculo de calidad y entrega para poner fin al programa del Oasis Jazz Funk U Festival 2016, pero desde la primera pieza del set list su voz apenas pudo estar a la altura de la excelente banda que la acompañaba, evidentemente la intérprete presentaba problemas de salud en la garganta.
Todo estaba preparado para pasar una gran noche y ello se apoyaba en la fama de la 20 veces nominada a los Grammy, 10 de los cuales se ha llevado a casa.
El festival de jazz funk ha sido un éxito, a pesar de lo ocurrido en el concierto de la intérprete oriunda de Chicago, quien apenas pudo malcantar cinco piezas que merecieron aplausos, a pesar de que su canto estuvo muy por debajo de la música de su grupo y del trío de excelentes coristas, que finalizaron la presentación convenciendo al público del alto nivel que tienen.
Primero el disfrute propio para luego agradar a los demás
Varios traían la fiesta encima y no se percataron de que algo andaba mal. Aplaudían como si no pasara nada. La Arena Grand Oasis estaba llena y la clientela aplaudió la primera parte de la velada, que estuvo a cargo de Fiusha, grupo mexicano de jazz funk con 16 años de historia. Los miembros de esta agrupación están integrados como una banda y son ellos los que primero disfrutan de su música, condición sine qua non para agradar a los demás. Su trabajo no ha estado excento de críticas e incomprensiones, pues hace tres lustros los consideraban fuera de lugar por tocar funk, señalado como de mal gusto.
Hoy el tiempo les ha dado la razón. En el mundo el funk es una música de moda con representantes de calidad. Fernando Toussaint, curador del festival, apostó este año por un ritmo que a todos deja contentos y los hace mover el cuerpo y la patita
, dijo a este medio.
Desde 2012, cuando fue el primer festival, hasta ahora, la fiesta anual de jazz y sus variantes ha logrado posicionarse y ahora turistas progaman su estadía en el Oasis Hotels and Resorts de Cancún para darse al reventón, descansar y oír jazz.
A un lado de los adolescentes gringos que llegan para hacer valer su dólar y portarse como no lo hacen en su país, los melómanos escuchan jazz en vivo, no sólo reggaetón, salsa u otros ritmos guapachosos propicios para el ambiente de playa, sol y arena.
El programa de este año era atractivo y respondió a las expectativas con el concierto excelso de Tower of Power, que para muchos quedará en la memoria como el mejor de todos los festivales. La baraja se abrió con otros colores, propuestos por Los Músicos de José, Hiram Gómez and Friends, Fiusha y la esperada pero fallida Chaka Khan, quien prometió volver al paradisiaco puerto para hacer olvidar el mal momento y el hecho de haber malinterpretado media docena de sus éxitos.
Queda el recuerdo amable de que los asistentes cooperaron para que la Fundación Oasis AC destine recursos a programas de apoyo a gente pobre de Cancún, que es mucha.
Total, que el sábado pasado la noche fue salvada por el grupo que apoya a Chaka, voz legendaria de Rufus, propuesta sonora interracial de los años 60. Si regresa y cumple así su promesa, los conocedores escucharán su educada y profunda voz, que la ha llevado a grabar con Chick Corea y Stanley Clarke y, así, mostrar una síntesis de temas de sus 30 discos.
Por la mañana del domingo 29, Chaka partió a otros ámbitos.