La restructuración de las secretarías de Educación Pública en Michoacán y Chiapas implica cambios en las leyes orgánicas que deben ser sometidos a los congresos locales, no es una decisión que pueda imponer la Federación, advirtieron profesores de ambas entidades.

Luego del anuncio del secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño, de que se trabaja en coordinación con autoridades de ambas entidades para restructurarlas, en un proceso similar al del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca, destacaron que la designación de quienes ocuparán la cartera educativa estatal y sus principales funcionarios, es responsabilidad del gobernador en turno, que nada tiene que ver con los maestros. No incidimos en quiénes serán o en el perfil que deben tener para ocupar esos cargos.

Salvador Almanza Fernández, secretario de organización de la sección 18 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, de Michoacán, explicó que la secretaria del Educación, Silvia Figueroa Zamudio (ex rectora de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo y hermana del ex gobernador priísta Genovevo Figueroa Zamudio), es muy cercana al subsecretario de Educación Superior, Salvador Jara, quien fue gobernador sustituto.

Daniel López, de la sección 7, de Chiapas, destacó: no podemos descartar que el anuncio de Nuño sea una nueva provocación, porque es derecho de los estados determinar la organización de sus dependencias.