a investigación de las creencias religiosas y sus expresiones sociales goza de muy buena salud. Un ejemplo es el próximo 19 Encuentro de la Red de Investigadores del Fenómeno Religioso en México (Rifrem), que tendrá lugar del 31 de mayo al 3 de junio en Tlaxcala. El programa de conferencias, presentaciones de libros y ponencias es nutrido, diverso y muy estimulante.
Quien tenga interés de revisar el listado de actividades podrá comprobar la amplitud de temáticas que abordarán los investigadores. La sola enumeración de las presentaciones evidencia que la comunidad académica mexicana interesada en documentar el fenómeno religioso es vigorosa y está diversificando su interés en temas emergentes dentro del campo religioso.
En anteriores encuentros de la Rifrem hubo ponencias sobre el islam y sus adherentes. En Tlaxcala las exposiciones serán más y enfocadas a especificidades que denotan ahondamiento por parte de los investigadores en su objeto de atención. Un pionero en el estudio de la presencia del islam en la nación mexicana es Gaspar Morquecho. Él tuvo el tino y la capacidad para comprender que se estaba gestando una nueva propuesta religiosa y social entre los indígenas chiapanecos, particularmente en la zona de San Cristóbal de Las Casas. Gaspar conjuntó sus descubrimientos y observaciones en Bajo la bandera del islam: un acercamiento a la identidad política y religiosa de los musulmanes en San Cristóbal de Las Casas y algunas expresiones de conflicto que se han presentado durante el proceso de construcción de la comunidad islámica en Chiapas, trabajo publicado por la mítica Ediciones Pirata en 2004. Recientemente puso al día lo que ha investigado sobre los indígenas tzotziles musulmanes, sostiene: “No hay duda que el Islam se ha establecido en Chiapas”.
Contabilizo en el programa de la Rifrem 10 ponencias sobre el islam y sus conversos/integrantes en México. Todas prometen ser ilustrativas del proceso de adentramiento de esa confesión en el país. Subrayo dos: Fusión y disrupción. Una peregrinación sufí a la Basílica de Guadalupe, de Lucía Cirianni Salazar, Escuela Nacional de Antropología e Historia y Universidad Libre de Berlín, y Las identidades islámicas glocales en México, de Ruth Jatziri García Linares, de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Otra temática fructífera, y que tendrá nutrida representación en Tlaxcala, es la de género y religión. La gama de presentaciones anunciadas es amplia y, por supuesto, diversa. Va desde las actitudes de distintas comunidades de fe hacia las identidades sexuales no tradicionales, pasa por las luchas al interior de las organizaciones religiosas por ganar espacios para una determinada expresión de género, e incluye estudios comparativos de la participación de las mujeres y ética reproductiva en distintas religiosidades.
México sigue en la senda de la diversificación religiosa. Debido a ello en la Rifrem se van a dar cita un buen número de quienes siguen las huellas de cómo se está dando esa diversificación no solamente en el país, sino también entre los mexicanos migrantes en el interior del país o hacia el extranjero. Sobre esto último, Daniel Ramírez aporta una perspectiva histórica en su libro Migrating Faith: Pentecostalism in the United States and Mexico in the Twentieth Century (The University of North Carolina Press, 2015), que será presentado en el encuentro de Rifrem.
El fenómeno religioso es muy dinámico y, por tanto, elusivo para quienes estudian sus manifestaciones y buscan sistematizar su estudio y explicarlo conceptualmente. Casi todos los autores clásicos de la sociología produjeron estudios en el campo de la sociología de la religión. En el espacio que es la Rifrem me interesa seguir lo que se exponga y dialogue en la mesa que lleva por nombre Sociología de la religión o sociología de la (de) secularización: desafíos metodológicos y conceptuales, que anuncia dos sesiones cuyo menú es antojable.
Es sustanciosa la oferta sobre el mundo pentecostal, o más bien los pentecostalismos y sus características en distintas partes de la geografía nacional. El pentecostalismo y el neopentecostalismo siguen atrayendo a sectores de la población mexicana, que engrosan sus filas por diversas motivaciones. El tema está incluido en la mesa Protestantes, evangélicos y pentecostales: actores, creencias y prácticas, que tendrá varias sesiones debido al interés de los especialistas por participar y exponer sobre el tópico.
Será muy estimulante participar en el encuentro de la Rifrem, que nos proveerá de abundantes insumos para tratar de continuar, en estas páginas, nuestra observación de las transformaciones del campo religioso mexicano.
