La Uia y la ONU ofrecen asistencia legal a quienes buscan refugio
Martes 24 de mayo de 2016, p. 16
La respuesta de las autoridades mexicanas a la crisis de refugiados ha sido inadecuada, ya que no les han brindado la información necesaria para solicitar asilo, aseveró Mark Manly, representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
Precisó que tan sólo 5 por ciento de las personas que pidieron refugio en México durante 2015 recibieron asesoría jurídica adecuada.
Ayer, la Universidad Iberoamericana (Uia) y el Acnur presentaron la primera Clínica Jurídica Alaíde Foppa para ofrecer asistencia legal a las personas que buscan protección como refugiadas en el país.
En el acto, Manly comentó que México no es el único país que vive una crisis en materia de refugiados, ya que las solicitudes de asilo en Estados Unidos, Costa Rica y Belice también han aumentado en los años recientes.
De acuerdo con la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), durante el año pasado 3 mil 423 personas, la mayoría de El Salvador y Honduras, solicitaron protección como refugiadas en México, lo que significó un aumento de 162 por ciento con respecto a 2013 y de 65 por ciento en relación con 2014. Sólo en los primeros dos meses de 2016, la Comar ha recibido 875 solicitudes de asilo.
Por su parte, Elba Coria, directora del encuentro jurídico, destacó que las autoridades mexicanas aún creen que los migrantes que llegan a la República Mexicana lo hacen en busca del sueño americano, por eso piensan: ¿para qué proteger a alguien que luego se irá a Estados Unidos?
La Clínica Jurídica Alaíde Foppa tiene el potencial de ayudar en territorio nacional que la protección a los migrantes sea efectiva y se puedan mejorar los procesos para que una persona tenga acceso al acompañamiento
, destacó la coordinadora del programa de derechos humanos de la Ibero, Denise González Núñez.
Los ponentes coincidieron en que, ante esta crisis regional, y tomando en cuenta el importante papel y tradición de México en la protección a refugiados, es necesario contar con jueces, abogados y actores sociales y comunitarios que tengan la sensibilidad, conocimientos y experiencia para representar y asesorar estos casos, comprometidos con hacer del derecho una herramienta para la transformación social, visibilizando aquellos que enfrentan mayores condiciones de vulnerabilidad, frecuentemente expuestos a la discriminación.
En la clínica, los estudiantes de la licenciatura en derecho de la Uia, con la supervisión de tres abogadas, pondrán en práctica sus conocimientos mediante la prestación de asistencia, asesoría y representación legal gratuita, gestionarán trámites migratorios y elaborarán demandas, quejas, recursos y documentos propios de procesos judiciales y administrativos, entre otras actividades.