Personas que acudieron a la octava edición de la Feria de las Culturas Amigas se quejaron de la falta de espacio para la movilidad de las personas que visitan los 94 locales instalados en el Zócalo. Algunas dijeron que hasta es difícil respirar, pues no hay ventilación suficiente en la estructura circular forrada y techada con costales de yute, que sirve de escenario a la exposición.

En un recorrido por las instalaciones se pudo observar que hay gran aglomeración de personas, que hace aumentar la de por sí elevada temperatura, sin que hubiera en el espacio áreas para el descanso de los asistentes.

El uso de estufas y hornos de microondas también aumentó el calor que se siente en el lugar y se incrementó con los paseantes que se detenían en los locales hasta más de 15 minutos para observar los productos extranjeros, formando filas más grandes, lo que ocasionó que aumentara la aglomeración y que la gente tuviera que salir y entrar por la falta de aire. Es muy difícil caminar; está todo encerrado y no hay ventilación; hay gente que se está desmayando, afirmó Martha Caballero.

El lugar es muy reducido, la gente se amontona, mi sugerencia es que por lo menos haya un guía en cada local para evitar que personas permanezcan mucho tiempo, ya que no compran nada ni dejan ver, expresó Israel Morales.

Otros manifestaron su agrado por conocer diversas culturas, ya que difícilmente podrían viajar a algunos de esos países y esta es una excelente opción para conocerlos. Recordaron que en las ferias anteriores, que se realizaban en el Paseo de la Reforma, había más espacio.

El lugar no me parece idóneo; la Plaza de la Constitución hace muy pequeño y estrecho el espacio. La primera vez que la visité fue en Paseo de la Reforma. Me parece un excelente lugar para realizar la feria, porque tienes espacio, ventilación e iluminación, aunque te asoleas, pero no es el estrés que vives adentro, porque no disfrutas ni visitas cada uno de los países, dijo María Isabel Reyes.

Me gustaba más cuando estaba en Paseo de la Reforma, porque había más espacio, aquí estamos amontonados, señaló también Ana Román.