Anuncia que interpondrá amparo
Martes 17 de mayo de 2016, p. 11
El 15 de octubre de 2005, el helicóptero TPH-09 de la comitiva del entonces presidente Vicente Fox sufrió un desperfecto mecánico cuando aterrizaba en Motozintla, Chiapas. Debido a la pericia y al adiestramiento de los pilotos del Estado Mayor Presidencial (EMP), los tripulantes y pasajeros salieron ilesos. Después de una minuciosa investigación, la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) concluyó que la actuación de los pilotos César Palomera Covarrubias y Ángel Zaid Vázquez fue impecable, lo cual les valió el reconocimiento de sus jefes.
Sin embargo, 11 años después el EMP dio la espalda a Palomera Covarrubias y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ordenó su baja del servicio activo, sin reconocer que la enfermedad cardiaca que le impide volar fue contraída durante el desempeño de su deber.
Luego de un largo proceso legal, la junta directiva del Instituto de Seguridad Social para las Fuerzas Armadas (Issfam) notificó ayer al teniente coronel Palomera su baja del servicio activo.
El militar, quien la mayoría de sus 28 años en las fuerzas armadas los desempeñó en el EMP, denunció que fue discriminado por las autoridades castrenses cuando se negaron a reconocer el origen de su mal, pero además por no aceptar que le fueran computadas y abonadas las horas de vuelo como tiempo de servicio, pese a que su actividad como piloto de la comitiva presidencial representó una actividad de alto riesgo.
El teniente coronel padece cardiopatía isquémica crónica con isquemia residual inferior más puente muscular a nivel de la arteria coronaria descendiente anterior y hernia de disco L-5-S1, con radiculopatía de miembros inferiores, lo cual le impide continuar en activo.
Ante la resolución del Issfam, el militar adelantó que interpondrá un juicio de amparo para hacer valer los derechos que le negó el mando castrense.
Palomera Covarrubias fue fundamental para que los reporteros que iban a bordo del helicóptero resultaran ilesos. Meses después la FAM concluyó que se trató de una falla técnica y que fue el acierto humano lo que evitó una catástrofe.
De acuerdo con los comunicadores que iban a bordo, falló uno de los motores del aparato al momento de iniciar las maniobras de aterrizaje en un campo deportivo habilitado como helipuerto.
El TPH-09 cayó unos 15 metros y quedó a poca distancia del helicóptero en que viajaban Fox Quesada y funcionarios de su gabinete. La aeronave sufrió daños en el cono del rotor y ya no pudo despegar.