En rueda de prensa al final el partido Ambriz declaró: “Quiero primero agradecer a Dios la posibilidad de estar en una semifinal más, la segunda consecutiva. Luego, felicitar a mis jugadores por su profesionalismo, y tercero, a la afición por su apoyo. Creo que hoy se van contentos a sus casas.

“Desde que el equipo ganó la Concachampions el plantel se metió en esta inercia; entonces los tengo que felicitar por ese temple, el orgullo, profesionalismo y, más que nada, por defender los colores del América.

“Ganar este tipo de clásicos, y más aún en una liguilla, es importante. Yo no vine a callarle la boca a nadie, vine a trabajar y así vamos, con trabajo y humildad.”

Destacó que en el grupo se ha conformado una familia en la que todos entienden y acatan sus posiciones.

Ambriz tiene contrato vigente, pero sabe que los técnicos dependen de los resultados, y ahora la afición “debe estar ilusionada; yo también lo estoy”.

En tanto, Gabriel Amato, auxiliar de Almeyda, destacó que enfrentaron a un rival de jerarquía “que tiene 12 extranjeros que marcan diferencia”; no obstante, “fuimos un digno rival”.

El estratega agregó: “tenemos un equipo de mexicanos de buen nivel; se hace difícil, pero con nuestras armas vamos a dar pelea siempre”.

Reconoció que la falla de Gullit marcó el rumbo, pero “las cosas a veces no se dan; creo que los jugadores dejaron el alma, es lo que hay que rescatar. Al inicio se hablaba del descenso y nos fuimos hasta la liguilla. Ahora duele el hecho de quedar fuera”.

Finalmente defendió a Gullit: “fallan los que patean, somos un grupo en las buenas y en las malas”, pero admitió: “Hubiese cambiado el juego”.