Madres de familia denuncian indiferencia del gobierno ante desapariciones
Miércoles 11 de mayo de 2016, p. 3
Madres y familiares de víctimas de desaparición reclamaron al gobierno de todos los niveles y mandos su indiferencia, omisión y falta de voluntad política para atender este problema, que tiene ya cifras y claros síntomas de ‘‘crisis humana’’.
Desde el Ángel de la Independencia señalaron que al no buscar a miles de personas desaparecidas las autoridades también las pretenden desaparecer. Incluso, las acusaron de ser ellas, en muchos de los casos, las responsables directas o cómplices de las desapariciones.
‘‘Nos duele tener que buscar en las fosas, pero rescatando huesos podemos dar vida, cierto consuelo a las madres y familiares que buscan desesperadamente a sus hijos en cualquier rincón del país.’’
Todos ellos tienen nombre y una familia que los busca, dijo María Herrera, madre que de manera incesante busca a sus hijos Jesús y Raúl Trujillo, desaparecidos en Guerrero en 2008, y a Luis Armando y Gustavo, en Veracruz en 2010.
Este 10 de mayo, Día de las Madres, decenas de ellas salieron en marcha para exigir la aparición con vida de sus hijos, verdad y justicia. Vestidas la mayoría con playeras blancas, portando mantas, pancartas y fotos estampadas con los rostros de sus seres queridos, partieron del Monumento a la Madre hacia el Ángel.
Marcha de la dignidad nacional
A la quinta Marcha de la dignidad nacional: madres buscando a sus hijos e hijas, y buscando verdad y justicia, se unieron múltiples organizaciones y colectivos de la sociedad civil, quienes hicieron suyo el reclamo.
Por el dolor causado, las circunstancias en que se dan y las crecientes cifras de este problema, las desapariciones son ya una ‘‘crisis humana’’ que el gobierno no quiere atender, dijeron.
Cifras oficiales señalan más de 27 mil desaparecidos o personas no localizadas, pero las estimaciones de los colectivos y centros de derechos humanos advierten que esta cifra podría duplicarse con el subregistro.
Congregadas desde temprano en el Monumento a la Madre, las organizaciones fueron colocando sobre el piso las decenas de mantas que las acompañarían en el recorrido por Paseo de la Reforma. ‘‘Ayúdanos a encontrarlo’’, ‘‘Te extrañamos mucho. Tus papás’’, ‘‘Se busca’’, fueron algunas de las frases impresas. Una más, inscrita en una playera, decía: ‘‘Hija, mientras no te encuentre te seguiré buscando’’.
A la marcha se sumaron madres de migrantes centroamericanos que han desaparecido en el país de paso hacia Estados Unidos, donde las autoridades mexicanas también son cómplices por acción u omisión, dijeron.
La larga lista de oradores, que rebasó la veintena, exigió al gobierno la aparición con vida de los desaparecidos, la verdad y la justicia. Sólo eso, nada más.
Por otra parte, madres de Xalapa, Veracruz y Coatzacoalcos dijeron que ‘‘cada minuto invertido en la búsqueda de nuestros hijos es un abrazo; cada hora de desvelo es un beso en su frente, y cada lágrima derramada es un grito de auxilio a quienes nos rodean para obtener su apoyo’’.
En Xalapa, la marcha recorrió de de la Normal Enrique C. Rebsamen a la Plaza Lerdo para exigir celeridad en la localización de los desaparecidos. ‘‘Han intentado que olvidemos, que desistamos de la lucha, pero no, por eso estamos aquí’’, expresó Sara González, del Colectivo por la Paz.
En Chihuahua, familiares de mil 870 desaparecidos realizaron marchas y misas en Ciudad Juárez, la capital y el municipio de Cuauhtémoc, para recordar que la desaparición forzada es un delito de lesa humanidad, donde cada año las autoridades no cumplen con dar resultados.
Aseguraron que México está en una profunda crisis de violación a los derechos humanos ante casos como Ayotzinapa, por lo que exigieron investigaciones exhaustivas, derecho a la verdad, reparación del daño y la aprobación de una ley nacional de desapariciones forzadas.
Por lo que hace a Morelos, las madres exigieron justicia para miles de jóvenes asesinados en la entidad. Marcharon de la fiscalía estatal en Cuernavaca a la explanada del palacio de gobierno, donde reiteraron que no tienen nada que celebrar porque están ‘‘muertas en vida’’.
Por otro lado, unas 60 madres de desaparecidos en Michoacán marcharon al palacio de gobierno y luego a la 21 Zona Militar de Morelia, donde señalaron que son 263 desaparecidos en los pasados nueve años, entre periodistas, estudiantes, maestros y activistas.
Finalmente, en Guadalajara, Jalisco, reclamaron a las autoridades que no hayan sido capaces de hallar a sus familiares ni detener las desapariciones, pues hasta ahora existen 3 mil 179 desaparecidos, lo que coloca a esta entidad como la segunda con este problema.
(E. Gómez, R. Villalpando, R. Morelos, E. Martínez y Juan Carlos G. Partida, corresponsales)