Viajar es soñar, y viceversa; el mundo es infinito si se le recorre, aunque otros ya hayan estado ahí, en ciertos lugares, afirmó en entrevista Lucas Masciano, quien con Jorge Marazu visita actualmente varias ciudades de México con el fin de recabar material para un documental e inspirarse para componer canciones con las que se integrará un disco.

Su tránsito lo llaman Sueños en ruta y el documental contendrá imágenes de conciertos. Sumarán entrevistas con el público y con músicos. Se trata de perder el miedo a vivir y de enfrentarnos al escenario de nuestra vida, precisó Lucas.

Unen su trabajo dos cantautores: el argentino Lucas Masciano y el español Jorge Marazu, para recorrer cinco ciudades mexicanas y dar conciertos. Ya estuvieron en León, Guanajuato y San Miguel de Allende. Hoy miércoles 11 darán un concierto en la CDMX, en el Indie Rocks, y el próximo viernes 13 en San Cristóbal de las Casas, en el 500 Noches.

Viajar es indispensable

Lucas publicó tres discos en su natal Argentina. En 2002 cruzó a España y desde entonces ha acumulado kilómetros de ruta.

Uno de sus objetivos se cumplió al lanzar al mercado su primer disco en España, al que siguió Patas arriba, producido por Pancho Varona, José Romero y Antonio García de Diego, la banda de Joaquín Sabina (otro viajero). Fue a India y se sintió marcado por la cultura de ese país.

Jorge Marazu es otra historia. Dice: “Mi camello se llama Samy; es de Marruecos”. Ha vivido en cinco países y habla cuatro idiomas. En 2012 consiguió publicar su primer disco, titulado La colección de relojes.

Lucas añadió que viajar se le ha vuelto indispensable. “Uno se aleja de ciertas realidades y se encuentra con otras cosas, se conocen culturas que enriquecen la vida. Soy fanático de los viajes y los complemento con la música. Estar en ésta ha sido un sueño. En el documental que estamos haciendo mostraremos gente con diferentes estilos de vida. Viajar es soñar. Hay quienes aplazan su deseo de viajar y se la pasan diciendo: ‘me hubiera gustado hacer tal o cual’. Eso se cuenta en el documental, con la música como hilo conductor. Estamos de gira y damos conciertos. Es la base.

Claro, se puede conocer el mundo estando en la sala de la casa. Eso depende de la apertura interior que se tenga. Cada uno tiene una inquietud diferente y hay personas que son felices estando en el mismo pueblo toda su vida.

–¿Cuál es la diferencia entre viajar y vagabundear?

–Vagabundear parece muy despectivo. Hay vagabundos felices porque han tenido una decisión en su vida y han optado por caminar. Lo importante no es el mote, sino cómo se sienta uno al hacerlo.

Lucas es seguidor de las películas de carretera, las roadmovies, como Thelma y Louise. Mi perspectiva del mundo es andariega. Me siento vivo escribiendo historias. Por suerte ahora estoy viajando con todo este equipo nuevo y a punto de sacar un disco. Viajo con mi chica. Traemos nuestra casa con nosotros.

Viajar es escuchar los sonidos de cada lugar. Para mí, México me suena a colores. Se supone que los colores no se pueden escuchar, pero depende de cómo los adviertas. México me suena a cosas muy vivas, a alegría, a un pueblo con mucho sentimiento, muy pasional. He oído a los mariachis y estoy tomando muchas ideas. México es un lugar muy inspirador. Es la segunda vez que vengo y estoy enamorao. En una letra digo que tengo el jardín más grande: el mundo entero. A mí no me da miedo viajar; por el contrario. Me da más miedo regresar.