Miércoles 11 de mayo de 2016, p. a14
Londres. Hinchas del West Ham atacaron este martes el autobús que trasladaba al Manchester United al estadio de Boleyn Ground, donde ambos equipos disputaron un partido aplazado de la Liga Premier que comenzó con 45 minutos de retraso y que acabó con la victoria londinense por 3-2. El capitán del United, Wayne Rooney, aseguró que el autobús quedó destrozado
por las botellas de vidrio, latas de bebida y otros objetos que les lanzaron.