Portó camiseta hecha con una bolsa de plástico y el nombre del astro
Miércoles 4 de mayo de 2016, p. 9
Quetta, Pakistán.
El niño afgano que cautivó a Internet con su camiseta de la selección argentina hecha con una bolsa de plástico pintada con el número 10, de Lionel Messi, tuvo que huir de su país tras recibir amenazas y su familia pidió asilo al Acnur (agencia de la ONU para refugiados) en Pakistán.
Murtaza Ahmadi fue sensación en la red en enero pasado después de que su hermano mayor publicó una foto en Facebook, en la que aparecía con una bolsa de plástico pintada con los colores de la camiseta albiceleste de Argentina y la inscripción Messi.
Después, el menor fue invitado a las oficinas del Unicef, en la capital Kabul, donde recibió dos playeras y un balón autografiado por el jugador del Barcelona.
La familia Ahmadi forma parte de la minoría hazara, de origen centroasiático, que con frecuencia ha sido discriminada por pertenecer al islam chiíta en un país mayoritariamente sunita, donde hay una insurrección armada de los talibanes.
La familia tuvo que huir de Ghazni a Pakistán desde Quetta, relató su padre, Mohamad Arif Ahmadi, quien dijo que comenzaron a recibir llamadas amenazadoras después de que su hijo ganó notoriedad por el tema de la camiseta.
Sentí que mi familia y yo estábamos en peligro, así que decidí que nos fuéramos de Afganistán
, relató, y especificó que primero había viajado a la capital Islamabad y que después se ubicaron en la ciudad de Quetta, cerca de la frontera.
Sin embargo, allí también se siente amenazado, por lo que pidió que la Acnur que lo enviaran a cualquier país seguro. No tengo ninguna opción
, dijo, al aludir a la atención mediática les generó muchos problemas, debido a la presencia de los talibanes.
Ahora, la familia desea partir a España, donde juega Messi, para que su hijo Murtaza pueda cumplir su sueño de convertirse en una superestrella del futbol.
