omo se vaticinó hace una semana, el Vive Latino 2016, ocurrido los días 23 y 24 de abril pasados, resultó ser más exitoso que su predecesor, y con creces cumplió el objetivo de concentrar mucho de lo mejor que está ocurriendo musicalmente a lo largo y ancho de los países de habla hispana. La forma estricta y detallada con que fue planeado el elenco y la reducción a dos días, hicieron de este Festival Iberoamericano de Cultura Musical, en su decimoséptima edición, un atinado ejercicio de diversidad y democracia sonora, que echó mano de casi todos los géneros posibles, equilibrando nacionalidades, generaciones, nichos, públicos, sonidos, como en pocas ocasiones, con la máxima del habla hispana como columna vertebral: tan bien cimentada, que, a la inversa de otras ediciones, el público prefirió en muchos momentos ver actos en español que artistas sajones. La competencia fue más leal y la algarabía se mantuvo arriba de inicio a fin, al haber concentrado en menos días, más sustancia sónica, ayudada por el buen clima: el sábado fresco con llovizna tenue; el domingo con sol radiante.

Enhorabuena a un festival que en los últimos años parecía perder la brújula y desbarrancarse, pues esta vez sirvió de gran escaparate para muchos buenos y nuevos talentos, sobre todo nacionales. Más años así.

A continuación, la ruta de lo notable en 2016, a decir de este espacio.

Lo inolvidable. Ni viéndolos muchas veces nos hartan, ni dejarán de impactar y ser amados: este show de Café Tacvba tocando completo el Avalancha de éxitos será recordado por su vochito de espejos colgante y por ese momento en que el argentino Vicentico como invitado no pudo cantar Ojalá que llueva café en son huasteco; con todo, el cuarteto reafirmó por qué sigue siendo la gran banda mexicana de rock local. Lleno de esplendor sonó Goran Bregovic y su unza-unza balcánico. Espectaculares, aguerridas, estuvieron las inglesas de Savages y su poderoso shoegaze-punk. Destructor y atascado estuvo The Prodigy y su dotación electro-punk-industrial. Para los tapatíos de Porter, éste fue su verdadero y gran regreso: congregaron multitudes, tocaron muy bien y la acogida a David Velasco, su nuevo cantante, de bello y alto registro vocal, fue vasta y cariñosa. El emotivo homenaje a Lalo Tex por parte del mismo Tex Tex e invitados como Eugenia León, Cecilia Toussaint, Alfonso André, Ricardo Ochoa, entre otros. Indiscutible la calidad, belleza y carisma de la talentosa Natalia Lafourcade. Muy divertido el regreso de Plastilina Mosh. Inesperado y de gran despliegue histriónico el acto de Los Toreros Muertos.

Lo bueno y bonito. El corazón entregado de Vicentico derritió almas y recordó en un tema a Prince. Similar cosa ocurrió con León Larregui y su lánguido cantar. Magnífico acto electrónico, quizá poco valorado, el de Disco Ruido. Belleza de avanzada pop sutil y elegante con la chilena Camila Moreno. Muy buen metal y stoner-rock preciso, clásico, con Black Overdrive. Virtuosismo a tope con Julio Revueltas. Pop espacial agradable con Reyno. Baile soleado, delicioso, con Los Yerberos. De España, la entrañable conexión de Dorian y el rap duro de Nach. De Colombia, electrónica y ritmos caribeños deliciosos con Systema Solar y Pedrina & Rio. De Cuba/Francia: el pop suave de Ibeyi.

Lo prometedor. Los sonidos nacionales de nueva generación dieron señales de esperanza con grandes proyectos como el synth-shoegaze de Big Big Love, Pumcayó y The Chamanas; el punk irreverente y muy bien tocado de De Nalgas; el indie-folk de Silva de Alegría, Ampersán e Ingrid Beaujean; también el de Kanaku y el Tigre (Perú) y Tototomás (Argentina).

Las grandes convocatorias. De fuerte arraigo popular, refrendaron plaza y cariño masivo: de Argentina, Los Auténticos Decadentes y Todos tus Muertos. De México, Carla Morrison, DLD, Rock en tu Idioma Sinfónico, Comisario Pantera. De España: Enrique Búnbury. De Irlanda: Two Door Cinema Club.

Toreros Muertos, Klezmerson y Combo sudaca

Viernes 29. Siguen en México Los Toreros Muertos y su delirante show. Caradura (Nuevo León 73, Condesa). 21 horas, $350.

Sábado 30. 1. El superdueto de productores belgas 2 Many DJs está de vuelta; gran fiesta asegurada. Sala (Puebla e Insurgentes, Roma). 22 horas, $550. 2. Jazz fusión de altura con Klezmerson. Imperial (Álvaro Obregón 293, Condesa). 22 horas, $100. 3. Combo sudaca: de Colombia: Los Petit Fellas; de Perú repite Kanaku y el Tigre. Indie Rocks (Zacatecas 39, Roma). 21 horas, $150.

Jueves 5. El vampiro inglés Peter Murphy vuelve a México con la gira Stripped, en la que recrea de forma acústica, desnuda, los éxitos de su carrera de solis-ta y quizá uno que otro de Bauhaus, su antigua y mítica banda. El Plaza (Juan Escutia 5, Condesa). 21 horas, $665 a $1000 (más conciertos).

Twitter: patipenaloza