Washington.

“Mi política externa pondrá siempre los intereses de los estadunidenses y la seguridad nacional por delante de cualquier otra cosa. ‘Primero Estados Unidos’ será el tema principal de mi administración”, dijo este miércoles el precandidato presidencial republicano Donald Trump durante un inusitado discurso formal, en el que advirtió a los países aliados que deberán pagar su parte para gozar de la protección militar de Washington.

Al exponer lo que será su política exterior de llegar a la Casa Blanca, el magnate delineó una agenda enfocada particularmente en Medio Oriente, el combate al islamismo radical y en naciones como Irán, Rusia y China, y omitió por completo a América Latina y Europa.

Dijo también que su gobierno no aceptará acuerdos comerciales que tengan un impacto adverso como el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), el cual describió como un desastre y advirtió que habrá consecuencias para las empresas estadunidenses que muevan sus operaciones a otros países.

Trump, quien acaba de ganar las primarias en cinco estados del noreste del país, trató de dar más detalles sobre su visión de la política internacional, que hasta ahora ha generado gran inquietud a nivel nacional e internacional. Sin embargo, dejó muchas preguntas sin responder, como por ejemplo cómo piensa derrotar al grupo Estado Islámico, aunque trató de proyectar su falta de detalles como una estrategia intencional para mantener a ciegas a los adversarios.

Como nación, tenemos que ser más impredecibles, declaró Trump, quien leyó su discurso de una pantalla electrónica, aunque ha criticado a los adversarios que lo hacen, y por lo general, hasta ahora, había hablado de manera improvisada.

Trump parecía estar enviando mensajes contradictorios a los aliados internacionales de Washington. Insistió en sus declaraciones previas de que otros países deben contribuir más a los tratados internacionales, como por ejemplo la Organización del Tratado del Atlántico Norte, si es que quieren seguir gozando de la protección militar estadunidense. Pero al mismo tiempo prometió que Estados Unidos está comprometido con la seguridad de sus aliados en el extranjero.

Muchas frases eran parecidas a las que tiende a usar en sus actos de campaña, aunque esta vez las articuló con un tono más serio y restringido. Los críticos lo han acusado de que no parece presidencial.

Gran parte de su discurso lo dedicó a criticar la política del gobierno de Barack Obama en Medio Oriente.

Antes de su discurso, la campaña de Hillary Clinton acusó al republicano de haber emitido la retórica más irresponsable de cualquier candidato presidencial de la época moderna.

En tanto, el senador ultraconservador Ted Cruz eligió a Carly Fiorina, ex directora ejecutiva de la empresa Hewlett-Packard, como su compañera de fórmula para contender a la presidencia estadunidense por el Partido Republicano. Fiorina dio su apoyo a Cruz hace pocos meses, después de abandonar su campaña por la nominación como la única mujer entre los muchos aspirantes republicanos. Nunca ha ejercido un cargo de elección popular.