Tras el anuncio del Gobierno de la Ciudad de México de emprender diversas acciones para combatir la violencia contra las mujeres con una visión de cero tolerancia, la policía capitalina desplegó –desde las primeras horas de ayer– a más de mil 200 policías, la mayoría mujeres, en distintos puntos de ascenso y descenso del transporte público, así como en rutas y trayectos de esas unidades, para evitar la comisión de actos ilícitos y reforzar la protección y seguridad, principalmente de las usuarias.

Los uniformados, que portaban un chaleco rosa como distintivo, se colocaron en estaciones del Sistema de Transporte Colectivo (STC), Metrobús, Trolebús y Tren Ligero, y en los principales centros de Transferencia Modal (paraderos) de la Ciudad de México, como Pantitlán, Tacubaya, Indios Verdes y Buenavista.

El operativo funcionará en horarios donde la concurrencia de personas es mayor, es decir, de seis a 9:30 de la mañana y de 18 a 21 horas.

Además de la presencia de los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina, también se realizan revisiones para evitar que los usuarios transporten sustancias nocivas, objetos para agredir o que pongan en riesgo a los demás ciudadanos, informó la dependencia.

En tanto, el STC desplegó a 475 integrantes de la Gerencia de Seguridad Institucional y a policías adscritos a este sistema para garantizar que los usuarios respeten el uso exclusivo de los vagones para mujeres.

Jorge Gaviño, director del STC, dijo que el operativo se aplicará los siete días de la semana y que la presencia de los elementos de seguridad pública se reforzará en las horas pico, es decir, por la mañana y por noche, especialmente en los andenes donde se registra mayor afluencia.

Por otra parte, candidatas del Partido de la Revolución Democrática a la Asamblea Constituyente presentaron nueve acciones –que buscarán sean incluidas en la constitución de la Ciudad de México– tendentes a generar condiciones de igualdad, evitar la violencia hacia las mujeres e incrementar sus derechos en esta capital.

En un foro organizado en la sede de ese partido, las candidatas alertaron, además, sobre el riesgo de que algún partido político pretenda echar atrás logros ya obtenidos en esta ciudad, como el derecho de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo.

Entre algunos de los planteamientos consensuados por las perredistas, que leyó Susana Alanís, están: la consolidación de los permisos de maternidad y paternidad, campañas amplias sobre la corresponsabilidad del trabajo en casa y salarios igualitarios en cuanto a género.

Así también: dar rango de secretaría al Instituto de las Mujeres; paridad en la integración de las áreas directivas del gobierno de la ciudad y erradicar la violencia obstétrica.