Amnistía Internacional (AI) señaló que el demoledor informe del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) sobre el caso Iguala es una nueva mancha en el atroz historial de derechos humanos del gobierno mexicano.

Érika Guevara-Rosas, directora para las Américas de AI con sede en México, criticó la actitud asumida por el gobierno mexicano de esconder e ignorar los hechos, en espera de que las acusaciones se esfumen con el tiempo o se olviden. Esto no es sólo ilegal e inmoral, es una cachetada en la cara de los familiares que, tras casi dos años, esperan respuestas.

Destacó que el informe contradice la versión oficial de los hechos defendida por el gobierno mexicano por medio de la Procuraduría General de la República (PGR), y critica severamente la investigación gubernamental.

La directiva de AI señaló también que el contenido del informe del GIEI –presentado ayer– acusa al gobierno de no haber seguido las líneas de investigación clave, manipular evidencias, proteger oficiales sospechosos de participar en las desapariciones forzadas y de torturar a presuntos responsables.

Mientras tanto, Joy Olson, directora ejecutiva de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (Wola, por sus siglas en inglés), tras reconocer el trabajo del GIEI criticó que el gobierno mexicano haya decidido obstruir la investigación, con el objetivo claro de confirmar su propia versión de los hechos, la cual carece de sustento y ha sido desacreditada. “Lo que México presentó como la ‘verdad histórica’ cada vez se asemeja más a un ‘encubrimiento histórico’”, enfatizó.

Maureen Meyer, coordinadora principal del Programa México, de la misma Wola, resaltó que ahora que los expertos han concluido su trabajo en la investigación, es vital que el gobierno mexicano dé seguimiento a las líneas de investigación propuestas”.

La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, la perredista Angélica de la Peña, destacó que el informe del GIEI demuestra el desastre que es la averiguación previa de la PGR con aquiensecia y eventual contubernio alevoso de algunos funcionarios públicos a los que se debe investigar.

El senador Alejandro Encinas destacó: El informe del GIEI es enfático y contundente, pone en evidencia muchas de las dudas que existían sobre la investigación oficial, muestra sus debilidades y el nivel de descomposición y corrupción que existe en los cuerpos policiacos.

Alejandro Sánchez Camacho, secretario de Acción Política Estratégica del PRD, aseveró que al no aceptar que se prolongue la estancia del GIEI, se demuestra que fue pura simulación la apertura del gobierno al permitir que participaran en las investigaciones para encontrar la verdad.

Por otra parte, en Olinalá Guerrero, al concluir el tercer Encuentro Nacional de Familiares, Amigos y Organizaciones Socia-les por la Libertad de los Presos Políticos, los participantes hicie-ron un llamado a que se presente con vida a los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos.

(Con información de Sergio Ocampo, corresponsal)