Dos agentes de la Policía Federal (PF) detenidos el pasado martes por haber participado en la tortura a una mujer en Ajuchitlán, Guerrero, el 4 de febrero de 2015, comparecieron este miércoles en un juzgado federal, donde negaron las acusaciones, mientras que la otra policía implicada en los hechos será presentada en las próximas horas ante la autoridad judicial para que se defina su situación jurídica.

También está pendiente que los dos militares que participaron en la tortura a Elvira Santibáñez (vinculada a La familia michoacana) sean notificados, en el interior de la prisión castrense ubicada en el Campo Militar número uno, de la nueva orden de aprehensión que enfrentan por ese caso, lo que ocurrirá en los próximos días.

De su lado, Santibáñez obtuvo un amparo de la justicia federal que le permitió ser trasladada de un penal federal con sede en Nayarit a una cárcel femenil ubicada en el estado de Morelos, informaron fuentes del Poder Judicial Federal.

Ayer, autoridades del juzgado quinto de distrito con sede en Iguala, Guerrero, efectuaron la audiencia de declaración preparatoria en contra de dos de los tres elementos de la PF involucrados en el caso de tortura a la mujer.

Se trata de dos agentes federales que no se ven en el video difundido por redes sociales, en el que se aprecia cómo dos militares y una oficial de la Policía Federal someten a Santibáñez a actos inhumanos y degradantes.

Respecto del caso de los dos militares implicados, que desde el año pasado se encuentran presos en el Campo Militar número uno, están procesados por el momento ante la justicia castrense por el delito de ‘‘desobediencia’’.

En días pasados, personal de la Procuraduría General de la República acudió al penal en que se encuentra recluida Santibáñez para tomar su declaración en calidad de víctima. En la diligencia, la mujer, vinculada a La familia michoacana, describió la forma como fue torturada y ayudó a identificar a sus agresores.