La caída en la producción de petróleo, y con ella de las actividades relacionadas con esta industria, puso de relieve los contrastes que marcan el desempeño de la economía mexicana.

Campeche, en cuyas aguas se producen tres de cada cuatro barriles de petróleo crudo, tuvo una contracción de su producto interno bruto (PIB) de 7.4 por ciento el último año, indicó un reporte de Banamex publicado ayer. Para ponerlo en términos comparativos, se trata de un desplome tan pronunciado como el que resentirá en 2016 Venezuela, el país con peor desempeño de la región latinoamericana, de acuerdo con proyecciones actualizadas la semana pasada por el Fondo Monetario Internacional (FMI).

En el otro extremo se encuentran entidades como Querétaro y Guanajuato, con industria manufacturera orientada a la exportación, que en el reciente año crecieron arriba de 7 por ciento, de acuerdo con el reporte Indicadores regionales de actividad económica 2016, elaborado por especialistas de Banamex. El desempeño de ambos estados, nuevamente para efectos comparativos, es equiparable al esperado por el FMI para India en 2016.

En 2015, la economía mexicana tuvo crecimiento de 2.5 por ciento. En un entorno de desaceleración global, este año, de acuerdo con el Banco de México, avanzará entre 2.5 y 3.5 por ciento.

El crecimiento económico del país estuvo sustentado principalmente en el dinamismo del mercado interno, mientras el motor externo dio muestras de deterioro, expuso Banamex.

Hubo heterogeneidad importante en el crecimiento económico estatal, derivado de la vocación productiva de cada zona, principalmente.

Las economías estatales registraron importantes contrastes de crecimiento durante 2015, la diferencia entre el desempeño de Querétaro, entidad con mayor incremento del PIB, y Campeche, que se ubicó al final de la tabla, es de 16.2 puntos porcentuales. De acuerdo con estimaciones de Banamex, el incremento del PIB del primero alcanzó una tasa de variación anual de 8.8 por ciento, mientras el de Campeche cayó 7.4 por ciento, según el estudio.

En 2015, gran parte de las entidades con mayor crecimiento económico sustentaron su desempeño en actividades industriales: los seis estados con mayor incremento en el PIB se caracterizan por tener alta vocación productiva en manufacturas.

Las dos economías de mayor tamaño relativo en el país, la Ciudad y el estado de México, tuvieron un crecimiento modesto, menor al nacional, de 1.7 por ciento en ambos casos. El bajo dinamismo de los servicios en la capital –su principal sector económico– explica el resultado. En el estado de México, la caída del sector primario se sumó al estancamiento en la industria y el modesto crecimiento de los servicios.