Plantearán que se elabore un reglamento para usar los cenotes
Jueves 14 de abril de 2016, p. 21
Ometusco, Méx.
Un proyecto multidisciplinario buscará proponer políticas públicas para proteger el acuífero de la Península de Yucatán. Es un trabajo para entender qué sucede con el recurso acuífero de la región, el cual es vulnerable y cada vez más contaminado, dijo Guillermo de Anda, arqueólogo subacuático de National Geographic Explorer, durante una conferencia en el quinto foro de turismo cultural Kultur, en este municipio mexiquense.
En una primera etapa de investigación se prevé un financiamiento de 220 mil dólares, poco más de 3.8 millones de pesos al tipo de cambio de este miércoles, por parte del Banco de Desarrollo para América Latina, el cual se ha preocupado por la contaminación del acuífero en la península, señaló el especialista.
El proyecto de estudio, que pudiera extenderse hasta cinco años, está apoyado por la Universidad Nacional Autónoma de México, el Instituto Nacional de Antropología e Historia, y el Instituto Tecnológico de la Riviera Maya. El grupo estará integrado por arqueólogos, biólogos, oceanógrafos y geólogos.
De Anda detalló que en la primera fase los estudios se realizarán en ocho zonas estratégicas de la península: al sur en la zona de Bacalar y Carrillo Puerto, la región de Tulum y Cobá, Chichen-Itzá, así como la laguna conocida como Chabela, al oriente de la Península.
Uno de los primeros objetivos es plantear propuestas de políticas públicas para reglamentar el uso de los cenotes y conjuntar, en un solo proyecto, todos los esfuerzos de la región encaminados a proteger al acuífero.
El arqueólogo indicó que hay indicios de contaminación en cenotes por diferentes motivos, entre ellos la actividad turística. En el proyecto de estudio queremos que los cenotes tengan beneficios provenientes del turismo, sobre todo si son ejidatarios, pero hay que cuidarlos
.
Señaló que hay cenotes donde ingresan hasta mil buceadores diarios, aunque esta cifra es muy conservadora, pues podría llegar a ser hasta de 3 mil personas, indicó De Anda. De allí la importancia de generar políticas públicas de protección de los acuíferos.
De Anda aseguró que en Quintana Roo no se tienen registros del saqueo de piezas arqueológicas en cenotes, no al menos de manera organizada. Lo que se ha detectado, agregó, son alteraciones en la ubicación de cráneos, por ejemplo, pero no de manera alevosa.